¿Otro capote a la banca? El mercado espera que Draghi compre directamente su deuda

Bancos centrales

¿Otro capote a la banca? El mercado espera que Draghi compre directamente su deuda

El margen de maniobra en las compras de deuda soberana es muy escaso, pero en el ámbito empresarial es mucho más amplio.

Mario Draghi, presidente del BCE

El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, afronta sus últimos meses al frente de la institución, pero todavía no ha dicho su última palabra. Junto a nuevos recortes de tipos, ahondando en el terreno negativo, los mercados apuestan por una nueva puesta en marcha de las compras de activos que esta vez deberá centrarse en la deuda empresarial. Y por primera vez la institución podría comprar directamente bonos bancarios.

Como parte de su anterior programa de compras, el BCE adquirió 2,2 billones de euros de deuda del sector público y 178.000 millones de euros en bonos de grado de inversión denominados en euros de emisores no financieros. “El margen de maniobra en otros programas de compra será limitado, pero este no es el caso de los bonos corporativos”, valoran Jeroen van den Broek y Carsten Brzeski, analistas de ING, en un informe.

A juicio de los expertos del banco holandés, “quedan muchas opciones en el mercado corporativo”. “Mientras que el límite de cuota de emisión se fijó en el 70%, el CSPP [como se denominó el programa de compra] ha comprado actualmente sólo 178.000 millones de euros (es decir, el 25%) de los aproximadamente 700.000 millones de euros del universo de grado de inversión de las sociedades no financieras elegibles en euros. Y esto se complementa con una oferta bruta estimada de nuevos bonos corporativos elegibles de 150.000 millones de euros al año”.

Pero más allá de este margen, los expertos de ING apuntan a otra opción: que el BCE incluya por primera vez los bonos bancarios en sus compras en un momento en que además las entidades se están viendo a obligadas a salir al mercado para colocar la denominada deuda ‘anticrisis’ para cumplir con el Mínimo Requerido de Pasivos Elegibles (MREL por sus siglas en inglés).

“Los bonos bancarios están claramente en juego, ya que el BCE busca activos adicionales a los que dirigirse”, y el proceso “ayudará al coste de financiación de los bancos”. “La nueva subdivisión de la deuda bancaria senior en ‘senior preferente’ y ‘bail in senior’ ayuda a lograrlo. La deuda debe ser una garantía elegible para que el BCE pueda comprarla y, desde finales de diciembre de 2017, está claro que la deuda bancaria preferente continuará cumpliendo con este criterio”.

Los analistas de ING apuntan que, si se analizan los bonos con un vencimiento de un año o más, “se observa que una nueva clase de activos de garantía por valor de 305.000 millones de euros está a la espera de que el BCE se fije como objetivo. Además de esta cantidad pendiente, esperamos un aumento de la emisión anual (hasta 100.000 millones de euros) que también se puede comprar”, apuntan los expertos.

Más información