Intereconomía cambia de dueño y se convierte en “El Toro TV”

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Intereconomía cambia de dueño y se convierte en “El Toro TV”

Tras un concurso de acreedores Julio Ariza pierde el control de la TDT.

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Intereconomía ha cambiado de dueño y de nombre pero no de logo. La TDT ha pasado a llamarse “El Toro TV” después de que el pasado mes de diciembre, la televisión pasaraa manos de una empresa murciana, Farnesio Ventures, de la que es dueño José Luis Hernández de Arce, antiguo consejero delegado de Polaris World, según cuenta elconfidencialdigital.com.

A continuación el digital recuerda que en marzo de 2015, las principales empresas que formaban parte del grupo Intereconomía entraron en concurso de acreedores, entre ellas la radio y la televisión.

Después de casi cinco años en los que el grupo de Julio Ariza había tocado fondo, se celebró subasta judicial para la venta de Radio Intereconomía, Radio Inter e Intereconomía TV. La puja se celebró el pasado mes de octubre, y se presentaron cuatro ofertas por Radio Intereconomía y cinco por Radio Inter.

En el momento final de la subasta, en diciembre de 2018, por Radio Intereconomía sólo pujaron dos: Radio Internacional y Silicon Radio, una empresa creada pocos meses antes, cuyo administrador único es Daniel Martín Escanciano, un ex empleado de Intereconomía. La puja se tramitó y Silicon Radio se quedó con la emisora.

Radio Inter, por el contrario, pasó a manos del Grupo Internacional de Medios, de capital chino y que preside Carlos Peñaloza. Desde el 14 de enero, Radio Internacional empezó a emitir desde las distintas frecuencias que tenía la emisora, además de incorporar también algunas frecuencias en FM.

A partir de ese momento, legalmente Julio Ariza perdió el control de las dos emisoras del grupo. Estaba pendiente de qué pasaba con Intereconomía TV.

Y revela que le han contado “fuentes cercanas a Intereconomía, que el abogado, Miguel Durán, presentó en julio de 2017 una oferta para quedarse con los activos de la cadena, además de asumir los costes de plantilla y contingencias.

Sin embargo, la oferta y las condiciones definitivas no convencieron a Durán, que decidió desentenderse de la adquisición.

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