“Ni un ladrillo en 16 años”: vecinos de Carabanchel exigen a Garrido los tres centros de salud prometidos

Madrid

“Ni un ladrillo en 16 años”: vecinos de Carabanchel exigen a Garrido los tres centros de salud prometidos

Unos 60.000 residentes son atendidos en centros obsoletos y saturados, ubicados en locales comerciales alquilados por Consejería de Sanidad.

Angel Garrido, portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid

En 2003, la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) y el Ayuntamiento de Madrid firmaron un Plan Especial de Inversiones para Carabanchel por el que Consistorio cedía a la Comunidad de Madrid terrenos para construir tres centros de salud. Hoy, casi 16 años después el Gobierno regional no ha puesto ni un solo ladrillo y los vecinos van a volver a sacar su indignación a la calle para exigir al Ejecutivo de Ángel Garrido que cumpla este compromiso.

Elena Sigüenza, portavoz de la Coordinadora de Asociaciones de Carabanchel, explica en el marco del plan de inversiones 2016-2019, la Comunidad de Madrid aprobó la construcción de los centros de salud de Comillas, Abrantes y Quince de Mayo, en Carabanchel Bajo, una actuación que calificó de “alta prioridad”, denunciando que “han pasado tres largos años y la vecindad no ha visto una sola piedra de alguno de ellos. “¿Esto es lo que entiende por alta prioridad el Gobierno regional?” se pregunta la representante vecinal, antes de subrayar que “los vecinos y vecinas llevan más de 16 años esperando la apertura de los tres equipamientos”, manifestando su hartazgo por ser tratados como “ciudadanos de segunda”.

Por ello, la Coordinadora de Asociaciones de Carabanchel ha convocado a los vecinos el próximo martes, 26 de febrero, a una manifestación que a las 18:00 horas partirá de la Plaza de Oporto y finalizará en la Glorieta de Marqués de Vadillo, tras discurrir por la calle General Ricardos. La protesta, que se llevará a cabo con el lema “Centros de Salud YA! No queremos más demoras ni mentiras!”. La marcha se producirá exactamente un año después de la celebración de otra protesta casi idéntica, recuerda el movimiento vecinal, que dice volver a salir a la calle “porque en estos doce meses apenas se han producido avances”. Y es que los residentes se quejan de que desde el Gobierno les dijeron que los tres centros de salud, al ser prioritarios, se iban a construir en esta legislatura, pero la legislatura está a punto de finalizar y no se ha colocado un solo ladrillo.

Indican que el pasado mes de diciembre y a preguntas del diputado del Grupo Socialista en la Asamblea de Madrid Rafael José Vélez, el Gobierno regional indicó que el Centro de Salud de San Isidro-Quince de Mayo “se encuentra dentro de las necesidades de nuevos centros de Atención Primaria y se está trabajando para que próximamente se ejecute y sea una realidad». De los tres equipamientos comprometidos, este es el que se halla en la fase más avanzada, pues ya tiene su “proyecto básico y de ejecución de obra” y cuenta con un informe favorable de la Gerencia Asistencial de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid. Para su ejecución, el Ayuntamiento ha transferido una parcela que se encuentra en la calle Comuneros de Castilla, 30. Sin embargo, los otros dos centros carecen aún de proyecto, y el de Comillas incluso de terreno sobre el que cimentarse.

Los vecinos denuncian que el retraso de los proyectos es muy importante y recuerdan que cuando el Gobierno regional informó en diciembre de los retrasos en la construcción del CS de Abrantes, que de igual forma se levantará en un terreno cedido por el Consistorio, dijo que “durante el ejercicio 2019 se procederá a la licitación, contratación, redacción y supervisión del proyecto básico y de ejecución del nuevo centro de salud, para lo cual existe dotación presupuestaria en el anteproyecto de presupuestos de 2019”.

Los vecinos, por ello, no entienden que está pasando y tampoco se explican que la Comunidad de Madrid haya rechazado la parcela propuesta por el Ayuntamiento para edificar el Centro de Salud de Comillas, al entender que sus 1.814 metros cuadrados son insuficientes «para las necesidades recogidas en el Programa Funcional de nuevo centro”, ya que estas requieren “una superficie asistencial de unos 3.100 m² construidos”, según respuesta del Gobierno autonómico a la pregunta del citado diputado Vélez. Un rechazo del terreno que iba a ser transferido, que se halla en el número 22 de la calle Antonio Leyva esquina calle de la Verdad, por el cual el proceso de construcción del Centro de Salud de Comillas vuelve a la casilla de salida. “

“No entendemos por qué a la Comunidad de Madrid no le sirve la parcela de Antonio Leyva; a nosotros no nos parece tan pequeña, de hecho es solo 200 m² menor que la del centro Quince de Mayo. Además, podría construir en altura, como ha hecho en otros sitios”, sugiere Sigüenza. “Pero nada, la Comunidad de Madrid seguirá pagando a propietarios privados miles y miles de euros cada mes en concepto de alquiler de los locales comerciales que hacen las veces de los tres centros de salud de la discordia, como ha hecho todos estos años”, denuncia la portavoz vecinal.

En locales comerciales

Y es que los vecinos recuerdan que debido al incumplimiento del Gobierno autonómico de sus compromisos con Carabanchel, “buena parte de la vecindad del distrito se ve obligada a recibir Atención Primaria en un centro de salud de Arganzuela, el Paseo Imperial, y en tres precarios espacios ubicados en locales comerciales de Carabanchel Bajo. Este hecho afecta a más de 78.000 habitantes del distrito, de los cuales 11.000 están adscritos al equipamiento de Arganzuela y el resto se reparte entre los centros temporales de Abrantes, Comillas y Quince de Mayo.

Recuerdan las asociaciones vecinales que llevan 16 años reclamando que estos tres últimos, hoy “obsoletos y saturados”, sean reemplazados por centros de salud modernos y adecuadamente equipados, una vieja reivindicación vecinal que el Ejecutivo autonómico “no parece tener mucha prisa en hacer realidad”.

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