Una perforación en el túnel del metro provocada por las obras que OHL está realizando en Canalejas ha suspendido parcialmente la Línea 2 del Metro de Madrid entre las estaciones de Sol y Retiro. Esa incidencia se produjo el pasado viernes, y a pesar de que la dirección del suburbano aseguró a comienzos de semana la puesta en marcha para este el martes de un bus gratuito que uniría las estaciones afectadas, aún no hay rastro de ese autobús.
“Circulación interrumpida en Línea 2 entre Retiro y Sol, en ambos sentidos, por incidencia en la infraestructura por causas ajenas a Metro. Desde el martes 29/01 circula un Servicio Especial gratuito entre Sol y Retiro”, informó Metro de Madrid en su perfil de Twitter el pasado lunes. Ese mismo día, la dirección del suburbano confirmó dicha información (ayer) “mientras dure el corte, para que usuarios lo usen, y sea el menor perjuicio posible”.
Sin embargo, este martes no había ningún autobús que realizara ese servicio especial gratuito anunciado.
Fuentes de la Consejería de Transportes de la Comunidad de Madrid aseguran a EL BOLETÍN que “probablemente” sea a partir de este viernes cuando se inaugure ese servicio especial, aunque prefieren no confirmarlo por el momento.
La definición del recorrido a realizar en un lugar tan concurrido dificulta la respuesta rápida. De hecho, la imposibilidad de ‘introducir’ una estación de autobuses temporal en la Puerta del Sol provoca que las principales alternativas de recorrido que baraja el Consorcio Regional de Transportes (CRTM) son Retiro – Callao o Retiro – Banco de España.
Por otro lado, el servicio especial que planea el Consorcio recorrerá calles donde existen zonas de aparcamiento SER. En ese sentido, el CRTM pretende avisar a los propietarios de los vehículos estacionados en vías donde circulará el autobús para no tener que sancionarlos y puedan recoger su coche a tiempo.
“El que rompe, paga”
Todas estas circunstancias provocan la demora en la puesta en marcha del servicio de autobús gratuito, aseguran desde el gobierno regional. Unas medidas tan concretas y estudiadas que pueden inducir que el tiempo de cierre parcial de la línea de metro será de varias, y no pocas, semanas.
En cuanto a quién paga el servicio especial de autobús, fuentes de la Consejería de Transportes aseguran a este diario que será la empresa responsable de los desperfectos a quien le entregarán la factura, esto es, a OHL.
“El que rompe, paga”, aseguran desde la consejería. A estas alturas se desconoce cuánto va a costar todo el operativo.
