Jordi Turull, Quim Forn, Josep Rull y Jordi Sànchez han puesto este jueves punto y final a su huelga de hambre. Tras 20 días de acción, su portavoz, Pilar Calvo, ha explicado que se concluye la protesta porque ya han conseguido sus objetivos.
La decisión, de hecho, llega tan solo un día después de que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, les asegurase que “ya han conseguido el objetivo de remover todas las conciencias que se tenían que remover”.
Sin embargo, la petición de Torra no ha sido la única que han recibido los presos independentistas en huelga de hambre. Este miércoles por la noche todos los expresidentes de la Generalitat y del Parlament de Cataluña también trasladaron un mensaje, así como el síndic de Greuges, Rafael Ribó.
“La huelga de hambre ha dado visibilidad a su situación procesal y ha removido conciencias a escala nacional e internacional”, aseguraron.
Esta misma mañana, el presidente del Euzkadi Buru Batzar del PNV, Andoni Ortuzar, ha visitado a los cuatro políticos catalanes que se encuentran presos para pedirles que concluyan la huelga de hambre “una vez alcanzados sus objetivos y para poder afrontar el juicio con fortaleza física y mental”.
“Hemos venido a iniciativa propia. Más allá de la vinculación política, nos une con muchos de los encarcelados una relación de amistad, y en estos momentos tan delicados y difíciles que están viviendo queríamos que sintieran nuestra cercanía y amistad”, ha valorado Ortuzar.
Respecto a la situación en la que cierran la huelga de hambre, únicamente Jordi Sànchez y Jordi Turull han tenido que recibir atención en la Enfermería de la prisión de Lledoners. Los dos líderes independentistas se encuentan en observación desde el pasado viernes.
La huelga no ha contado con el apoyo de los presos de ERC, Oriol Junqueras y Raül Romeva, ni de Jordi Cuixart.
