El ‘abrazo del oso’ de Pablo Casado a VOX: evita criticar al partido y le ofrece su mano

Duelo en la derecha

El ‘abrazo del oso’ de Pablo Casado a VOX: evita criticar al partido y le ofrece su mano

El líder del Partido Popular evita criticar al partido de extrema derecha e incluso le ofrece acuerdos.

Pablo Casado y Teodoro García Egea

Medios de comunicación, periodistas y analistas políticos llevan varios días cuestionando cuál es la mejor forma de combatir el discurso de extrema derecha del partido VOX para evitar que se propague como lo hizo el Frente Nacional en Francia o la Lega en Italia. Entre las respuestas, pocas responsabilizan a Pablo Casado, uno de los posibles damnificados en un hipotético ascenso del partido de Santiago Abascal.

La irrupción de VOX condiciona (aún más) el discurso de los dos principales partidos de derecha que hay en el Congreso de los Diputados, PP y Ciudadanos, cuya rivalidad ya les había empujado a una desinhibición ideológica por acaparar el voto de la derecha: toma de las instituciones catalanas (Mossos, TV3), críticas a la decisión de rescatar a centenares de inmigrantes a la deriva, rebaja fiscal para las grandes compañías o el señalamiento de los manteros como problema de Estado, entre otras.

El acto multitudinario que realizó VOX el pasado domingo en la plaza de Vistalegre de Madrid disparó las alarmas en las sedes de Ciudadanos y PP, que han decidido ‘obviar’ al partido de extrema derecha antes que criticarlo. De hecho, el presidente popular, Pablo Casado, ha decidido tender una mano al equipo de Santiago Abascal.

Una mano que bien puede ser un ‘abrazo del oso’.

“Para mí el mundo ideal es que Foro, PAR, UPN, Ciudadanos, y Vox estemos unidos o en coalición… Que exista una concentración de los esfuerzos del centroderecha liberal y conservador”, aseguró Casado en una entrevista concedida a El Mundo.

El líder del PP asegura que comparte muchas ideas con VOX, partido que no califica como extrema derecha (“nueva derecha”) y con cuyo fundador mantiene “una relación excelente”.

La estrategia de Casado hace más difícil la estrategia ‘mártir’ de Santiago Absacal. No es tan sencillo asegurar que el establishment no te quiere cuando el presidente del PP afirma desear formar una coalición contigo.

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