En concreto, el déficit se situó en 43.100 millones de dólares, respecto a los 46.100 millones de la cifra revisada de abril. El mercado había augurado que el saldo negativo de la economía estadounidense se situase en 43.600 millones.
Para llegar a esta cifra, las exportaciones aumentaron un 1,9% hasta alcanzar un récord de 215.300 millones de dólares, después de que EEUU vendiese en el exterior más aviones de pasajeros y más soja –cereal que puede ser objetivo de las represalias de China-. En ese sentido, algunos compradores podrían haber acumulado ciertos bienes antes de la entrada de vigor de los aranceles.
Las importaciones, por su parte, aumentaron un 0,4% hasta los 258.400 millones de euros. EEUU importó más teléfonos móviles y ordenadores y menos medicamentos farmacéuticos.