El expresidente del Gobierno José María Aznar reaparecerá este jueves en unas jornadas organizadas por el Instituto Atlántico, que él mismo encabeza. Su regreso coincide con la carrera que se ha desatado en las filas del PP por la sucesión de Mariano Rajoy. Por el momento Aznar no se ha posicionado a favor de ningún candidato. No ha tomado partido por nadie. Se mantiene «al margen», como él mismo, defiende este domingo en una entrevista a El Mundo. Una postura que podría cambiar (o no) en la clausura de la III Semana Atlántica, que correrá a cargo del exprimer ministro de Francia, Manuel Valls.
El exmandatario galo protagonizará el cierre de estas jornadas con una conferencia titulada ‘La importancia de los valores en la política’ a la que asistirá, según informa el Instituto Atlántico, José María Aznar. Se trata de uno de los primeros actos en público del presidente de FAES desde que su sucesor en el Partido Popular, Mariano Rajoy, anunciara su ‘adiós’ dando de esta manera el pistoletazo de salida al Congreso extraordinario que se celebrará en Madrid los días 20 y 21 de julio.
En juego está el nombre del próximo líder de la formación conservadora. Y Aznar aún no se ha ‘mojado’ por ningún candidato. Sin embargo, en las filas del PP hay quién ya apunta que su candidato sería Pablo Casado, que fue durante tres años su director de gabinete. Asimismo, el rival de María Dolores de Cospedal y Soraya Sáenz de Santamaría, entre otros aspirantes, no tiene reparos en ensalzar la figura y la gestión del exjefe del Ejecutivo. Pero Aznar no quiere, por ahora, decantarse por nadie.
Además de la presencia de Valls en estas jornadas, con la que, tal y como informó ELBOLETIN, Aznar lanza un guiño a Ciudadanos, en ellas participarán el presidente de la Cámara de Comercio Estados Unidos-España, Jaime Malet; el exsecretario general del Tesoro y Política Financiera Fernando Navarrete, así como el director general de la OIT, Guy Ryder.
Junto a ellos están previstas las intervenciones del oficial de Inteligencia del Israel Defense Forces (IDF), Gabriel Prisiallni; del director general de K2 Intelligence, Bruce Goslin, y del socio director de Syntagma, Luis Felipe López. El senador y exdirector general de la Policía, Ignacio Cosidó, también hablará en estas jornadas.
Precisamente, este último escenificó su apoyo a Casado en la pugna por la Presidencia del PP al ‘arroparle’ el pasado miércoles en la presentación en Génova de los avales. Y es que los populares están ahora mismo divididos en varios bandos.
Por un lado, los que apoyan a Santamaría, entre los que están los exministros Álvaro Nadal, Fátima Báñez, Íñigo de la Serna e Íñigo Méndez de Vigo. Por otro, aquellos que cierran filas en torno a Cospedal, como los extitulares del Gobierno Rafael Catalá, Dolors Montserrat, Juan Ignacio Zoido e Isabel García Tejerina. Casado, por su parte, cuenta con el respaldo, además de Cosidó, de Javier Maroto.
Aznar promete quedarse “al margen”
El expresidente del Gobierno sí que ha afirmado este domingo en una entrevista a El Mundo que se va “a quedar al margen” de este proceso “porque creo que es mi papel”. “Por eso dije que no me sentía representado por nadie”, señala antes de defender que “nunca he creído en el aznarismo y no lo he practicado”.
“No me va a coger con la guardia suficientemente baja como para hablar de los candidatos”, responde preguntado por la relación entre él y Casado.
Para Aznar “hay una oportunidad para reconstruir el centroderecha y renovar y refundar el PP” y “si se hace, podrá volver a ser un partido de Gobierno”. En caso contrario, la formación “corre el grave riesgo de dejar de ser un partido con posibilidades de Gobierno. Si no se hace, lo harán los electores en las elecciones”.
Asimismo destaca que le “cuesta mucho aceptar lecciones de lealtad cuando he estado a punto de ser asesinado por defender a mi país, mis ideas y mi partido”. “Sobre todo que lo digan personas que se han dedicado a intentar enterrar 14 años de historia del PP. La lealtad no es el silencio”, advierte antes de recordar que él entregó “un partido de centroderecha unido”.
“Evidentemente, no es lo mismo tener el 45% de los votos que el 23%. Si el PP quiere recuperarse, tendrá que dirigirse a esos millones de votos que se han ido del PP a Ciudadanos”, aconseja el exjefe del Ejecutivo, que admite que la última vez que habló con Mariano Rajoy fue hace tres años.
