Trump tiende la mano a ZTE y allana el camino para un acercamiento entre EEUU y China

Guerra comercial

Trump tiende la mano a ZTE y allana el camino para un acercamiento entre EEUU y China

El mandatario ha prometido en Twitter que está trabajando para resolver el conflicto con la tecnológica china.

Donald Trump

Donald Trump ha suavizado su discurso contra China de cara a la inminente visita de viceprimer ministro de la potencia asiática a EEUU. En un mensaje en la red social Twitter, el mandatario ha revelado que está trabajando con su homólogo chino, Xi Jinping, para que la tecnológica ZTE “vuelva a hacer negocios rápido” en EEUU, después de haber prohibido a las empresas del país norteamericano vender componentes a dicha compañía durante siete años.

“El presidente XI de China, y yo estamos trabajando juntos para dar a la compañía de telefonía china ZTE, una manera rápida de volver a los negocios. Se han perdido muchos trabajos en China. El Departamento de Comercio ha sido instruido para conseguir que se haga”, ha publicado Trump en su perfile en la plataforma del pájaro azul.

Este inesperado comentario, que allana el camino a una negociación entre EEUU y China para evitar una guerra comercial, ha llegado apenas dos días antes de que Liu He, el viceprimer ministro chino y principal responsable del Departamento de Comercio del país, Liu He, inicie mañana su visita a EEUU para continuar con las conversaciones.

Trump había ‘castigado’ a ZTE a raíz de la venta de equipos a Irán. En marzo de 2017, la compañía china ya acordó pagar una multa de 1.192 millones de dólares al Gobierno de EEUU por este asunto, sin embargo, el Departamento de Comercio del país norteamericano asegura ahora que la tecnológica premió a los trabajadores que cometieron esta conducta ilegal y mintió sobre las prácticas a las autoridades estadounidenses al respecto.

“ZTE engañó al Departamento de Comercio. En lugar de reprender al personal de ZTE y a la alta gerencia, ZTE los recompensó”, afirmó el secretario de Comercio, Wilbur Ross, en un comunicado. Según EEUU, la empresa pagó primas a los empleados implicados y rehusó amonestaciones. “Este comportamiento atroz no puede ser ignorado”, añadía la nota.

Tras ello, la semana pasado ZTE anunció que paralizaba todas sus operaciones. Dejó de fabricar y vender teléfonos en todo el mundo al no poder continuar con su desarrollo debido a la falta de componentes esenciales.

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