Las dos compañías de ingeniería que diseñaron el trazado del circuito de Fórmula 1 de Valencia pactaron con el ejecutivo regional de Francisco Camps recibir el contrato público. Así lo revela el informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) enviado al juzgado de Instrucción número 2 de Valencia, del que informa eldiario.es.
Ese escrito policial desvela la contratación ‘a dedo’ del antiguo gobierno regional del PP, que adjudicó el polémico contrato de casi cinco millones de euros a una UTE (unión temporal de empresas) antes de que esa unión existiera sobre el papel.
La adjudicación que ganaron Typsa y Ayesa antes de poder presentarse, según la investigación policial, se materializó en un contrato dividido en tres partes: el estudio de los viales de acceso a la ciudad desde el Puerto de Valencia, la conexión con las grandes avenidas y la dirección de las obras de los grandes enlaces del circuito.
“La UTE fue adjudicataria de dos contratos 12 de marzo de 2007 y 25 de junio de 2007 antes de la elevación a escritura pública de la constitución de la Unión Temporal de Empresas el 5 de julio de 2007”, relata la policía según informa el citado diario.
El amaño previo de la adjudicación se decidió en la Consellería de Infraestructuras, cuando Camps era presidente de la Generalitat. La policía ha incautado los expedientes que prueban estos hechos y que también investiga el juzgado de Instrucción número 17 de Valencia, en un caso en el que se imputa al exconseller popular Mario Flores y su número dos en el departamento Victoriano Sánchez Barcaiztegui, además de al propio expresidente Camps. Se espera que ambas causas se unifiquen.
Además del amaño en la adjudicación del contrato, una de las partes del proyecto obtuvo más tarde un modificado de 1,5 millones de euros, que elevó el total cobrado por las dos ingenierías hasta los seis millones de euros.
