El bitcoin se mantiene estancado alrededor de los 7.000 dólares, prácticamente la mitad de lo que costaba la criptomoneda cuando comenzó el año. Tras a tocar incluso los 17.000 billetes verdes en los primeros días de enero, la divisa virtual más popular se ha ido desinflando y ni siquiera las recientes noticias que aseguran que el multimillonario George Soros planea invertir en este mercado han funcionado como punto de inflexión.
Soros ha sido una de las voces más críticas con las monedas digitales, a las que llegó a calificar en más de una ocasión de “burbuja”. En el Foro Económico Mundial aseguró que no podrían funcionar como divisas reales, debido a su extrema volatilidad.
Desde entonces, el precio del bitcoin y resto de critpmonedas se ha desplomado. Y precisamente, esta caída sería la que habría motivado la entrada del popular magnate y otros multimillonarios como la familia Rockefeller al mercado de las divisas virtuales.
Según publicada hace unos días Bloomberg, la gestora de patrimonios familiares de Soros, que mueve 26.000 millones de dólares, planea negociar estos activos digitales De acuerdo a estas informaciones, Adam Fisher, quien supervisa macroinversiones para Soros Fund Management, con sede en Nueva York, ha recibido autorización para negociar con monedas virtuales aunque aún no ha hecho ninguna apuesta, según fuentes cercanas a la firma.
Por su parte, CoinTelegraph informaba de que el fondo de capital riesgo de los Rockefeller, Venrock, se ha asociado con la plataforma CoinFund para invertir en criptodivisas y tecnología ‘blockchain’.
Tras estas noticias, el bitcoin repuntó levente el fin de semana hasta acercarse a los 7.200 dólares, pero ha vuelto a ceder por debajo de la barrera de los 7.000 billetes verdes. Desde el 28 de marzo no ha recuperado los 8.000 dólares.
