La agencia de calificación Moody’s ha advertido de que algunas de las medidas avanzadas la semana pasada por el ministro de Energía, Álvaro Nadal, para ajustar las retribuciones al sector eléctrico por las actividades de transporte y distribución y para endurecer el cierre de centrales eléctricas “tendrán implicaciones crediticias negativas” para las empresas.
Durante su comparecencia ante la comisión de Energía en el Congreso para dar explicaciones por la sentencia que anula la indemnización por Castor y por la fuerte subida del precio de la luz, Nadal explicó que el Gobierno propondrá una serie de recortes a estas retribuciones por cerca de 250 millones de euros, de los cuales algo menos de 200 millones de euros corresponden al sector eléctrico y otros 50 millones de euros al sector gasista.
Además, anunció que el departamento está estudiando un cambio normativo para que la responsabilidad de desmantelar las centrales nucleares pase de la empresa pública Enresa a las compañías privadas propietarias de las plantas.
En un informe al que ha accedido Efe, la firma estadounidense señala que el impacto de dichos ajustes y reformas será especialmente duro para Red Eléctrica de España (Baa1 estable), y para los principales operadores de plantas nucleares Endesa e Iberdrola (Baa1 positiva).
Tiene sin embargo mejores perspectivas para las compañías más ligadas al petróleo y el gas, gracias a la recuperación de los precios y reducciones de costes. En el caso de Repsol (Baa2 estable), sostiene que “se beneficiará del crecimiento de sus operaciones” tanto en exploración y producción como en refinería y comercialización (‘downstream’).
