Mariano Rajoy sigue a vueltas con los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018. Al día siguiente de las elecciones catalanas, el PP aseguró que el Gobierno intensificaría la ronda de contactos y que el resultado de los comicios no afectaría. Poco después, el propio presidente del Ejecutivo afirmó que las cuentas iban a salir adelante sin problemas. Y ya entrado febrero, la negociación continúa.
A pesar de que Ciudadanos ha elevado las exigencias y que el PNV (dos partidos necesarios para aprobar las cuentas) insiste en que sin que se resuelva el conflicto catalán no habrá apoyo, los populares se mantienen firmes en que no habrá mayores dificultades. El coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maillo, ha aseverado que Rajoy sigue con la ronda de contacto, aunque ha trasladado la presión a las fuerzas parlamentarias para que “se sienten a negociar”, aparcando las actitudes de “bloqueo” u “obstruccionistas”.
De hecho, el dirigente conservador ha hablado de la necesidad de que la oposición “arrime” el hombro para que los PGE sean una realidad. “Invitamos a todos aquellos que están en una actitud de bloqueo que salgan de esa situación y no se inventen más excusas”, ha trasladado Maillo. Es más, ha pedido que los partidos dejen de pensar en hipotéticas “elecciones” porque no hay “a la vista” ninguna.
Aun así, tras la reunión del comité de dirección en Génova, Maillo ha confirmado que Rajoy está hablando con las formaciones para contar con ellos para las cuentas de 2018. En este sentido, el conservador ha indicado, tal y como ha recogido Europa Press, que no todos esos contactos tienen que ser públicos, al haber “muchos contactos privados” para avanzar en la negociación.
