El BCE desafía a la Eurocámara y sigue adelante con su plan contra los créditos tóxicos

Bancos europeos

El BCE desafía a la Eurocámara y sigue adelante con su plan contra los créditos tóxicos

El Parlamento Europeo y el Gobierno italiano han criticado con dureza los planes del BCE para obligar a los bancos a provisionar los créditos morosos.

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Ni las presiones del Gobierno italiano ni las de Bruselas parecen frenar al Banco Central Europeo (BCE), que sigue firme en su propósito de aprobar su agresivo plan contra los préstamos incobrables de los bancos, más allá de maquillar algunas de sus propuestas.

La francesa Danièle Nouy, presidenta del Consejo de Supervisión del BCE, se ha mostrado en público dispuesta a mejorar la redacción del plan haciendo algunas concesiones. Pero el núcleo duro permanecerá invariable, según publica la agencia Bloomberg, que cita fuentes que pidieron no ser identificadas porque las deliberaciones con privadas.

El BCE anunció el pasado octubre que planea pedir a los bancos que se hagan con más colaterales sobre los préstamos morosos, en un movimiento con el que pretende desalentar que los mantengan en sus balances durante períodos de tiempo largos. En concreto, el borrador con el que se trabaja otorgará a los bancos un plazo de siete años para cubrir en su totalidad los créditos morosos garantizados y de dos años para la deuda no garantizada.

La medida no se aplicará para el casi un billón de euros de créditos incobrables que lastran los balances de los bancos europeos, aunque muchos de los países representados en el Consejo de Supervisión del BCE apoyan un enfoque similar para estos.

El borrador se hizo público el 4 de octubre, y las reacciones no tardaron en llegar. Una de las más airadas la de Italia, con un sector financiero que arrastra casi un tercio de todos los préstamos morosos de la banca europea. El ministro de Finanzas del país, Pier Carlo Padoan, llegó a advertir que la medida obligaría a las entidades a deshacerse de deuda tóxica demasiado rápido y haría “descarrilar” la recuperación del sector.

A sus críticas se unió otro relevante político italiano: nada menos que el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, que acusó al BCE de ir mucho más allá de lo que establece su mandato. Pero también el servicio jurídico del Consejo de la Unión Europea, que funciona como la segunda cámara de la legislatura de la UE y representa los intereses de los gobiernos nacionales del bloque, se ha expresado de la misma manera, aunque su opinión no es vinculante.

Pero estas críticas no parecen haber frenado al BCE. Nouy ha reconocido que la institución no tiene los poderes del denominado ‘Pilar 1’, que permitirían al BCE establecer reglas que se apliquen a todos los bancos en todas partes. Sin embargo, con una modificación, las propuestas pueden ser reescritas para que quede claro que están dentro del alcance del ‘Pilar 2’, que permite al supervisor establecer las reglas caso por caso.

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