A poco más de dos semanas para las elecciones generales de Alemania, el Partido Socialdemócrata (SPD), principal rival de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel, cayó a su nivel más bajo desde enero, según la encuesta actual de la televisión pública alemana ARD. En el sondeo «Deutschlandtrend», los socialdemócratas cayeron dos puntos respecto a la semana anterior hasta situarse en el 21 por ciento de la intención de voto. Es el peor valor del partido en esta encuesta desde el 5 de enero de 2017, antes de que nombraran a Martin Schulz como presidente del partido y rival de Merkel en los comicios.
La Unión -formada por la CDU y su socio bávaro, la Unión Cristianosocial (CSU)- se mantuvo sin cambios como la fuerza política con más apoyo con un 37 por ciento. Mientras, en tercera posición se mantuvieron los ultraderechistas de Alternativa para Alemania (AfD) con un 11 por ciento.
La Izquierda subió un punto hasta el diez por ciento, al igual que el Partido Liberal (FDP) que ascendió hasta el nueve por ciento. Los Verdes, por su parte, persisten en el ocho por ciento.
En el caso de una elección directa, Merkel parece haber salido beneficiada del primer y único debate electoral con Schulz el pasado lunes. La mandataria alemana, que lucha por un cuarto mandato consecutivo, obtendría un 54 por ciento de los votos, cinco puntos más que en el pasado sondeo. Por su parte, Schulz se mantuvo sin cambios en un 26 por ciento y un 14 por ciento (cuatro puntos menos) no elegirían a ninguno de los dos.
Además, el 52 por ciento de los ciudadanos quiere que el próximo Gobierno alemán esté liderado por la CDU/CSU, frente al 49 por ciento registrado a principios de agosto. Por el contrario, el 30 por ciento desea que el SPD sea quien lleve las riendas, frente al 38 por ciento de hace un mes.
«Deutschlandtrend» es una encuesta realizada por Infratest dimap a petición del canal público ARD. Se preguntó a 1.503 personas sobre su intención de voto en las elecciones generales y se encuestó a 1.003 personas sobre su preferencia para ocupar el cargo de canciller.
