La economía portuguesa sigue dando buenas noticias. En el segundo trimestre del año creció un 2,8%, según datos adelantados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística de Portugal.
La evolución del Producto Interno Bruto (PIB) frente al primer trimestre del año fue del 0,2%, varias décimas por debajo de lo esperado.
"La demanda externa neta ha experimentado una contribución ligeramente negativa a la variación interanual del PIB", según el INE. Eso se debe a una "acentuada desaceleración en el volumen de las exportaciones de bienes y servicios por encima de las importaciones".
En cualquier caso, la demanda interna "mantuvo una aportación positiva elevada, superior al del trimestre precedente, como resultado de la aceleración de la inversión".