Señoría, que el reglamento del Congreso conceda al candidato a la presidencia del Gobierno que figura en la moción de censura disponer de tiempo ilimitado en la presentación de su programa y en la réplica a los portavoces parlamentarios le ha perjudicado gravemente. Discursos de tres horas son disuasivos salvo para militantes caribeños, constituyen un intento de erigirse en definidor único del bien y el mal, del patriota y el desertor y de sembrar la discordia, mientras con arrogante humildad descalifica a los demás y acaba sacando lo peor de un vergonzoso PP.
“Desde aquí hay que comprender y respetar al presidente. Pero a los compañeros, a las compañeras, a los simpatizantes, a los simpatizantes les pido…