En primer lugar, un curso de formación aumenta nuestra preparación por lo que afecta a nuestra competitividad como trabajador.
El panorama laboral en España no todo lo bueno que podría ser. Después de una crisis económica a nivel nacional e, incluso, europea, los datos del paro siguen siendo demasiado elevados como para poder hablar de recuperación económica total. Las personas que han terminado sus estudios entre el año 2008 y 2015, ha tenido que recurrir a alternativas ya que encontrar un empleo no ha sido sencillo. Las oportunidades no han sido muchas y la mayoría de personas han decidido invertir en viajar a otros países para poder desarrollar su profesión, o en continuar formándose para estar más preparado que el resto.
Ambas opciones son muy válidas para una persona que acaba de terminar una carrera, e incluso para un profesional que ha perdido su trabajo recientemente. Si lo que buscas es continuar aprendiendo, renovando conceptos y manteniéndote activo en el aprendizaje de tu sector, te recomendamos que realices algún tipo de curso. Los cursos formativos nunca están de más, son la forma perfecta de mantenerte en tu sector, aprendiendo nuevos conocimientos y, sobre todo, gente de tu entorno empresarial que ¿quién sabe? Puede surgir algún tipo de colaboración o contrato. Lo importante es no perder la ilusión y no tirar por la borda tu vocación.
Motivos para realizar un curso
En primer lugar, un curso de formación aumenta nuestra preparación por lo que afecta a nuestra competitividad como trabajador. Incrementa nuestras capacidades y nos da un valor añadido. Haber realizado un curso puede ser la diferencia entre que nos contraten o no. Y por supuesto, el peso que haga caer la balanza hacia nuestro terreno. Las empresas buscan trabajadores multidisciplinares, que sepan desenvolverse en diferentes ámbitos y que tengan dominio que diferentes áreas. Cuantas más tareas sean capaces de hacer, más oportunidades tendrás. Es lo que hoy en día se llama “multi-task”
En segundo lugar, nos ayuda mucho en nuestro currículum. Aunque estés trabajando, es bueno mostrar interés en la formación que ofrecen diferentes cursos. Por ejemplo, si desarrollar tu labor en el sector de la economía, algunos cursos de Contabilidad pueden aportar mucho valor a tu CV además de conocimiento que no tenías tan actualizados. En el mundo laboral, nos centramos en las acciones que realizamos a diario y, muchas veces, olvidamos roles y actividades simplemente por el hecho de no usarlo a diario. En caso de que no estés trabajando, un curso como este puede ayudarte a crear una microempresa y lograr ingresos extra mientras encuentras un trabajo mejor. Incluso, puede ayudarte a gestionar mejor tu economía del hogar.
Una buena educación es la inversión del futuro. Debemos estudiar la calidad y el precio de la oferta formativa para ver si es atractivo invertir en él. Si estás pensando desde hace tiempo realizar un curso de Banca y Finanzas, empieza por estudiar las alternativas que te ofrece la oferta formativa. Una vez que tengas claro el temario y el precio de cada curso, podrás elegir mejor cual te compensa. Tal vez, después de analizar los cursos, decidas que la mejor opción es hacer un master. Tendrás que tener en cuenta que un estudio superior tiene un precio más elevado y que la dedicación debe ser mayor. Por ejemplo, si buscas Masters de Empresa y Economía, deberás saber que el número de horas que tendrás que dedicarle será mucho mayor que si fuera un curso formativo.
Por último, tendrás que valorar si deseas una formación presencial o a distancia. A día de hoy, con los avances tecnológicos de los que disponemos, elegir una formación a distancia es un éxito asegurado. Hoy en día ya no se considera peor este tipo de formación ya que tenemos a nuestro alcance muchas formas de comunicarnos con profesores y resto de alumnos. La tecnología ha hecho que los cursos online hayan alcanzado la importancia de la formación presencial. Además, esto puede ayudarte a estudiar cursos o Masters que no estén en tu ciudad.
Ventajas formación a distancia
La formación tradicional es conocida por todos. No pasa lo mismo con la formación a distancia. Hasta hace poco, la gente no se atrevía a estudiar un curso online. Teníamos una idea preconcebida de que la formación online era menos exigente y la preparación no era la misma. Hoy en día, gracias a los avances tecnológicos, la formación online ha ganado mucho terreno.
Cada vez queremos más especialización y el hecho de que el curso que te encanta sólo se imparta en una ciudad a 500 kilómetros de ti, no tiene que ser motivo para no hacerlo. La flexibilidad horaria y la posibilidad de poder estudiar desde donde tu quieras, hacen de la oferta formativa a distancia una opción muy válida. Además, con los constantes medios de comunicación que se crean a través de redes sociales, videoconferencias en directo y chats en vivo, parecerá que la formación es presencial. El contacto con los demás a través de Internet, la actualización constante de material y de contenido y, además, la variedad de formatos, hacen que la oferta online sea plenamente competitiva a día de hoy.
La experiencia de otros alumnos pueden ayudarte a confiar plenamente en un curso de formación online. Busca webs de referencia donde te ayuden a decidir que tipo de formación es mejor para ti y donde puedas ver la experiencia que otros usuarios han tenido. Elegir bien el centro en el que contratar un curso o master puede ser la diferencia entre el éxito o el fracaso. En un mundo cada vez más social, la gestión de la información y la manera de realizar las búsquedas, nos ayudarán a tomar la decisión correcta.
Las empresas buscan cada vez personas más preparadas ya sea con un curso presencial, a distancia u online, por eso debes buscar profesionales que te ofrezcan una formación cuidada y de calidad que te ayude a encontrar ese trabajo que necesitas o, simplemente, a mejorar tu futuro laboral en un plazo próximo.
