Decenas de ciudades restringen el tráfico en zonas comerciales (aunque lo ignore Esperanza Aguirre)

Restricción del tráfico en Madrid

Decenas de ciudades restringen el tráfico en zonas comerciales (aunque lo ignore Esperanza Aguirre)

Gran Vía

A la líder del PP municipal no le pareció tan mala idea restringir el tráfico en la Gran Vía cuando la planteó Alberto Ruiz-Gallardón en 2003. Esperanza Aguirre, líder del Partido Popular en el Ayuntamiento de Madrid, va a denunciar al consistorio. Lo va a hacer porque no le gustan nada las restricciones – temporales – al tráfico de vehículos privados en la Gran Vía de Madrid, medida impulsada hace unos días por el Ejecutivo de Manuela Carmena. En 2003, cuando Alberto Ruíz-Gallardón planteaba la misma idea que Carmena, a la por entonces presidenta de la Comunidad no le parecía tan mala idea.
 
Sin embargo, Aguirre considera ahora que la medida ‘improvisada’ del ayuntamiento perjudica a los comerciantes: “Creo que sinceramente no se lo han pensado, y si se lo han pensado, sus raíces y objetivos han pasado por encima de pisotear los derechos de comerciantes, vecinos y hosteleros”, asegura Aguirre, portavoz del PP en el ayuntamiento, que atisba como “inimaginable” que algo así sucediera en la londinense Oxford Street y en la neoyorquina Quinta Avenida.
 
No obstante, la lideresa del PP ignora que Oxford Street lleva años restringiendo el tráfico a vehículos privados en Navidad. Durante estas fechas, la famosa calle londinense solo permite la circulación de taxis y autobuses. Además, tal y como adelantó el diario británico Times, el nuevo alcalde de Londres, Sadiq Khan, llevará a cabo la peatonalización completa de la calle para 2020.
 
Este es solo un ejemplo de las muchísimas ciudades europeas y no europeas que han apostado por la peatonalización del centro de las ciudades en aras de recuperar espacio peatonal y mejorar el medio ambiente. A pesar de que Esperanza Aguirre se pregunte “dónde se ha visto [restringir el tráfico] en una zona comercial de una gran ciudad occidental”, existen decenas de ejemplos que la contradicen.
 
Por ejemplo, el propio Times Square de Nueva York, que desde el 2009 decidió restringir parte del tráfico para peatonalizar una zona amplia de la plaza. Además de Nueva York, Barcelona. Como recuerda el portal ecomovilidad.net, Portal de l’Angel, la calle comercial por excelencia de Barcelona es peatonal desde hace años. “Cuenta con decenas de tiendas de gran tráfico peatonal y un edificio de El Corte Inglés. De hecho, es la calle comercial con el alquiler más caro de España”, afirma la plataforma.
 
En Roma, un tramo considerable de la Via del Corso, en Bruselas la Rue Neuve y en Lisboa la Rúa Augusta también son peatonales al mismo tiempo que centros neurálgicos para el comercio y los hosteleros. Bilbao, San Sebastián, Valencia, Zaragoza y Granada son otras de las muchas ciudades que han apostado por peatonalizar varias calles céntricas, que lejos de perjudicar a los comerciantes, ha acabado por beneficiarles.
 
La comodidad para caminar y la higiene medioambiental y sonora de estos espacios repercute directamente en el ánimo de los viandantes, que encuentran espacios de reunión y paseo en plena zona comercial. Lo que, a priori, sería el deseo de cualquier comerciante.
 
Sin embargo, en un comienzo, medidas como la adoptada por el Ejecutivo de Manuela Carmena conllevan incertidumbre y protestas entre los hosteleros. De hecho, conviene recordar en ocasiones como esta que los propios comerciantes de Preciados y El Carmen (Madrid) boicotearon la medida de peatonalizar las calles en 1968. Decían que se iban a arruinar con la peatonalización de una zona que comercialmente pasó a ser una de las grandes referencias del país.
 
Apenas acaba de empezar
 
La decisión sobre la restricción del tráfico (menos a taxis, buses y residentes) en la Gran Vía de Madrid durante estas fechas es solo un avance de la voluntad final del consistorio, que es extender indefinidamente esta medida. El Ayuntamiento está decidido en coger las riendas definitivamente y ponerse serio en favor de la sostenibilidad, la comodidad peatonal y la reducción de la contaminación. Para ello, resulta indispensable, aseguran desde el consistorio, proceder a la peatonalización de varias zonas del centro de Madrid, así como restringir el tráfico a vehículos privados (excepto taxis, buses y residentes) en prácticamente toda la almendra central.
 
La Delegada de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Inés Sabanés, ha explicado la decisión de ‘cortar’ la Gran Vía en un artículo de El País donde asegura que “actualmente, nuestra ciudad reserva el 80% del espacio público al vehículo privado, aunque este mueve a menos del 30% de los madrileños. Como es obvio, es una gestión muy ineficaz, además de anticuada, de un recurso muy valioso”.
 
Sabanés denuncia que “el tráfico de vehículos privados, con alta intensidad y bajas ocupaciones por vehículo, es el principal causante de la contaminación atmosférica en las ciudades”, por lo que “es necesario minimizar su impacto, atemperarlo, racionalizándolo y primando el uso de tecnologías limpias, especialmente en los puntos más vulnerables de la ciudad. El derecho a la salud, a respirar un aire limpio y a vivir sin ruido, son derechos prioritarios”, concluye la concejala de Ahora Madrid.

Más información