Cómo y dónde conseguir inversión para tu startup

Startups

Cómo y dónde conseguir inversión para tu startup

Innovación

Crowdfunding, business angels, aceleradoras, venture capital… La apuesta de pequeños inversores e inversores profesionales en empresas en fase de desarrollo coge impulso. El volumen total de inversiones recibidas el año pasado por las startups españolas subió en 2015 un 83%, hasta alcanzar los 660 millones de euros, una cifra récord de financiación para estas empresas en etapa inicial de desarrollo radicadas en nuestro país. Aunque los números están aún muy alejados de los registrados en otros países, este crecimiento es una buena muestra del interés de los inversores por nuevos proyectos. Pero, ¿cómo acceder a este dinero? ¿Qué tipo de inversores pueden ayudarte a sacar adelante tu idea?
 
En un primer momento, lo más sencillo y cómodo es recurrir a pequeños inversores cercanos que puedan ayudar a dar los primeros pasos, como la familia, los amigos y los conocidos que quieran aportar su granito de arena y que no exijan altos intereses por ofrecer su dinero. Son los denominados ‘tres F’: family, friends and fools (familiares, amigos y locos).
 
También están las plataformas de equity crowdfunding, en las que las startups pueden dar a conocer sus proyectos e intentar seducir a otros pequeños inversores en un abanico más amplio, pues son un vehículo para que particulares puedan invertir en empresas hasta ahora reservadas a inversores profesionales e institucionales. La más conocida es Crowdcube, líder en Europa y aprobada y supervisada recientemente por la CNMV. Lleva ya un total de 417 empresas financiadas y el año pasado realizó 16 nuevas inversiones, según el informe ‘El Capital Riesgo Informal en España 2016’, con datos referentes a 2015, publicado por Webcapitalriesgo.
 
Para una financiación más abultada puede contactarse con los denominados business angels, personas que invierten su propio patrimonio en empresas innovadoras en fases iniciales, normalmente a cambio de una participación accionaria. De acuerdo a la firma especializada en asesoría a startups Ad&Law, mediante esta fórmula puede lograrse habitualmente una inversión media de 50.000 euros. Estarían así entre las ‘tres F’, cuya capacidad de inversión es más baja, y el capital riesgo, que suele contemplar inversiones más ambiciosas.
 
Hay varias redes de business angels, como la del centro de estudios y negocios IESE, que durante el curso académico 2015-2016 invirtió más de 4 millones euros para impulsar la creación de 26 ‘startups’. En la actualidad, la red cuenta con 150 miembros activos y más de 200 pasivos que actúan a través de clubes de inversión creados por los antiguos alumnos. También ESADE tiene una red de inversores privados promovida por alumnos y antiguos alumnos que busca dinamizar la actividad emprendedora e inversora en España.
 
Ad&Law aconseja acudir a las aceleradoras o incubadoras cuando el proyecto esté asentado, ya que permiten obtener más capital, hasta 200.000 euros, y perfeccionar el modelo de negocio. Se trata de programas con un plazo de tiempo estipulado y basados en convocatorias que además de ayudar con la financiación ofrecen asesoramiento, formación y tutorización. En estos casos, conviene revisar detalladamente las condiciones de los contratos.
 
Entre las aceleradoras españolas destaca Wayra, de Telefónica, que según el citado informe fue el inversor que más nuevas operaciones de financiación acometió en el año pasado, con 78. Ofrece una financiación de hasta 50.000 dólares (unos 45.000 euros), además de un espacio de trabajo que permite estar en contacto con otros proyectos y fomentar el networking. Da además la posibilidad de hacer negocios con los millones de clientes de la ‘teleco’.
 
Por otro lado está Lanzadera, una iniciativa impulsada por el empresario Juan Roig, el presidente de Mercadona. Ha impulsado en los últimos años 54 empresas con una inversión total de 7,1 millones de euros, según apunta en su web.
 
Impact, es otra de las aceleradoras más destacadas en España, orientada principalmente al ‘mobile’. Ofrece subvenciones en tres fases, en base a los hitos que vayan cumpliendo los emprendedores, formación y mentoring y networking con inversores europeos. En 2015 realizó 19 nuevas inversiones.
 
La financiación de los business angels, las plataformas de crowdfunding y las aceleradoras supuso el 5% del total de la inversión en startups españolas. Quienes más aportaron fueron las entidades de Venture Capital, responsables del 81%, que incrementaron su inversión en un año en un 83%, de acuerdo al estudio de Webcapitalriesgo. Se trata de empresas dedicadas al capital riesgo que inyectan grandes sumas de capital a las startups a cambio de condiciones como la presencia en el consejo de administración de la empresa o la toma de decisiones estratégicas, además de una rentabilidad mínima del 30% del capital invertido, señala Ad&Law. La gran ventaja que ofrecen, además de la elevada financiación, es su capacidad de aportar negocio.
 
Destacan fondos como Active Venture Partners, fundado en 2014, que fue uno de los principales impulsores de BuyVIP, adquirida por Amazon en 2010 por 110 millones de dólares (97,5 millones de euros). Restalo o PackLink son otros de los proyectos por los que ha apostado. Bonsai Venture Capital, nacida en 1999, es una de las firmas de capital riesgo más antiguos de España. Entre sus inversiones de éxito: Wallapop, Idealista o Softonic. Seaya Ventures, impulsada por la hija del presidente del BBVA, Beatriz González realiza inversiones en startups en fase crecimiento y ha invertido en Cabify o Ticketea. Otra firma es Caixa Capital Ric, del banco catalán.
 
Por último, los emprendedores también pueden obtener capital de instrumentos públicos como los fondos Enisa, CDTI y otros organismos regionales. La ventaja: permiten mantener el control de la empresa y las participaciones accionariales. El principal escollo: estos préstamos suelen exigir cierto grado de coinversión y nivel de actividad. El año pasado realizaron el 14% de las inversiones.

Más información