Las inmobiliarias lideran la lista de valores más rentables desde que comenzó 2010. El regreso de la especulación sobre estas compañías parece encontrarse detrás de las abultadas subidas registradas, según los analistas consultados por EL BOLETIN. Además, muchas de ellas se encuentran inmersas en fuertes procesos de refinanciación de deuda, cuestión que podría salir adelante sin problemas ya que en la mayoría de los casos sus principales accionistas son los bancos.
Las acciones de Reyal Urbis, Afirma, Urbas, Aisa, Inmobiliaria Colonial, Metrovacesa y Renta Corporación acumulan desde el 1 de enero revalorizaciones que superan holgadamente el 10%. A pesar de estas notables subidas, la recuperación del sector aún se encuentra muy lejos, por lo que los expertos barajan otros motivos. Los analistas explican que el bajo ‘fre float’ (capital que circula libremente en el mercado) de las inmobiliarias han atraído en el último año a los especuladores bursátiles. Esto es, determinan los expertos, porque las cotas de volatilidad son muy altas. “Cuando estos valores suben lo hace de manera exagerada”, sin embargo “también existe el riesgo que cuando bajan lo hacen profundamente”. En el caso de Reyal Urbis el ‘free float’ es inferior al 10%.
Las refinanciaciones de deuda de las inmobiliarias es otro de los motivos para explicar las revalorizaciones del arranque del año. En este supuesto, Metrovacesa, Inmobiliaria Colonial y Reyal Urbis tienen tres procesos abiertos desde verano para renegociar 17.000 millones de euros. Los analistas estiman que las negociaciones saldrán adelante por el mero hecho de tener en sus accionariados a los propios bancos.
Metrovacesa, controlada por varios bancos, entre las que destacan el Santander y BBVA, acumula 6.200 millones de euros de endeudamiento, de los que 3.200 millones de euros están vinculados al crédito sindicado suscrito para financiar la compra de la francesa Gecina.
Colonial, por su parte, tiene un plan de refinanciación que contempla estructurar su deuda de 4.900 millones en tres tramos: un 35% se convertirá en acciones de la sociedad mediante una ampliación de capital, otro 45% se saldará con la venta de activos, fundamentalmente inmuebles en renta, y el 20% restante que se engloba en la actividad promotora y de gestión del suelo.
Por último, Reyal Urbis ultima un período de carencia de tres años en el pago de su deuda, que asciende a 4.900 millones de euros, y la obtención de un crédito puente de más de 150 millones de euros.
Como contrapartida, la inmobiliaria ofrece a sus cincuenta y tres bancos (liderados por Santander, Banesto, Barclays, Caja Madrid y BBVA) la venta de una serie de activos (hace dos semanas se desprendió de la Torre Ombu de Madrid por 45 millones) con cuyo importe devolverá el crédito puente; una reducción drástica de costes y la suspensión de la actividad promotora salvo en proyectos muy avanzados; y su supervisión financiera por un representante de los bancos.
