Juan Velayos, consejero delegado de Neinor Homes, ha calificado la medida de Colau de las licencias hosteleras como “una broma”. Para Carmena también ha habido recados por cuestionar operaciones inmobiliarias “impolutas”. El sector inmobiliario mira con recelo y anda con pies de plomo ante lo que pueda suceder tanto el próximo 20-D como todo lo relacionado con la cuestión catalana. Aun así, preocupa más, lo que los propios directivos han calificado como la “incertidumbre política” que puede hacer “descarrilar” al sector, como ha afirmado Ismael Clemente, presidente de Merlin Properties y definido como “el nuevo rey del inmobiliario”, que lo que se vive en Cataluña.
En un encuentro informativo celebrado en Madrid por Europa Press con la presencia de grandes nombres como el citado Ismael Clemente; Juan Velayos, consejero delegado de Neinor Homes y Julián Cabanillas, CEO de Servihabitat, han coincidido en restarle importancia al proceso catalán y a cómo lo viven los inversores. “El inversor internacional lo ve más sencillo: la independencia dura hasta hacer las cuentas”, así de contundente ha sido Clemente que ha incidido en que continuarán comprando en la región admitiendo así “el reto de estar en Cataluña”. A pesar de esta visión, ha reconocido que los inversores les “fríen a test de estrés” para sopesar el riesgo. Por esa línea de despreocupación ha continuado Cabanillas que ha visto cómo “todos los inversores se interesan, pero no he observado decisiones tomadas en relación con la situación. Lo analizan con calma”. La objeción la ha puesto Velayos que sí se ha mostrado más preocupado por “la imagen de seriedad que estamos dando”.
Si los ejecutivos quitan hierro al asunto catalán, se lo añaden a lo que pueda salir de las urnas electorales. Poniendo voz a los inversores, el calificado como ‘el nuevo rey del inmobiliario’ no quiere poner frenos al camino que se está tomando: “Todos hemos hecho esfuerzos para salir de la crisis y ahora paralizarlo sería nadar para morir en la orilla y esto sí lo ven los inversores”. Algo que ha coincidido con la postura del CEO de Servihabitat que entiende que una “posible ralentización” estaría “más vinculada al 20-D por si se frenan las reformas” que a lo que acontece a Cataluña que únicamente “afecta a los que están allí”. Dos visiones podrían salir de la cita electoral si finalmente se llega a esa “ralentización”: un calado menor si hablamos a largo plazo porque si se paraliza el crecimiento del sector no será algo “infinito”, según ha analizado Clemente; en cambio, a “corto plazo puede doler tras el prestigio que hemos alcanzado con la recuperación”.
Los protagonistas del acto no han perdido la ocasión de lanzar mensajes a Ada Colau y a Manuela Carmena –sin nombrarlas- por sus decisiones a nivel inmobiliario. “En Cataluña lo de las licencias hosteleras es una broma” y “En Madrid algunos han hecho operaciones impolutas y les están poniendo dudas” han sido los recados que ha mandado Juan Velayos a las políticas que han propuesto las dos alcaldesas. Todo lo contrario lo dirigido al Gobierno al que han felicitado por la recuperación económica, algo que afecta, según los expertos, positivamente a su sector. Además los tres directores no han perdido la ocasión, por la presencia de su directivo, de aplaudir, lo que para ellos es, “la medida estrella” del PP: la creación de la Sareb. “Un gran acierto”, “Decisión perfectamente definida con la que alcanzamos velocidad de crucero o cerca de ello”, “De aquí a unos años se estudiará como un caso espectacular de desarrollo” y “Ha dotado de certidumbre” han sido los piropos que ha recibido Jaime Echegoyen, presidente del conocido como ‘banco malo’, que escuchaba atentamente lo que le decían los directivos.
