El tribunal alega que los exdirectivos sabían “con total seguridad que el uso de las tarjetas no tenían reflejo en la nómina”. La Audiencia Nacional ha confirmado el auto del juez Fernando Andreu del pasado 28 de enero por el que citaba como imputados a siete exdirectivos de Caja Madrid que utilizaron las tarjetas black. En los autos, los magistrados desestiman los recursos presentados por Rodolfo Benito Valenciano, Juan Emilio Iranzo, Gonzalo Martín Pascual, Jose Acoste Cubrero, Fernando Serrano Antón, Antonio Rey de Viñas y Antonio Cámara Eguinoa.
En el auto los jueces sostienen que su imputación por delito de administración desleal resulta “cuando menos, por el momento, lógica y coherente, al igual que respecto del resto de los miembros del citado Consejo”. Asimismo, alegan que el recurrente era “perfecto conocedor de que las tarjetas no tenían reflejo ni en la nómina ni en el certificado de retenciones que se le entregaba a efectos fiscales”.
Además, en el auto por el que se resuelve el recurso de Fernando Serrano, los jueces aseguran que, sin perjuicio del resultado final de la investigación, “su imputación por existir indicios en su contra supone una garantía para él mismo, al darle entrada en el procedimiento permitiéndole ejercitar convenientemente el derecho de defensa”.
Asimismo, añaden, “no existe en el ordenamiento jurídico español posibilidad alguna de que la declaración del inicialmente denunciado, que ha de ser llamado a declarar como imputado por mandato legal, pueda ser sustituida por declaración de su Letrado mediante escrito”.
