CiU: “La Troika debería estar bajo el control del Parlamento Europeo”

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CiU: “La Troika debería estar bajo el control del Parlamento Europeo”

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«Aunque los partidos políticos estamos forzando la situación para tratar que el presidente de la Comisión sea elegido democráticamente, cabe señalar que la nominación será llevada a cabo por el Consejo Europeo» Por primera vez en unas elecciones el votante elige Parlamento y presidente de la Comisión. ¿Qué opinan de este nuevo modelo? ¿Proponen algún cambio en el proceso de composición interna de los organismos comunitarios?

Creo que aunque los partidos políticos estamos forzando la situación para tratar que el presidente de la Comisión sea elegido democráticamente, cabe señalar que la nominación será llevada a cabo por el Consejo Europeo (es decir, los jefes de gobierno), así que en un escenario como el que se prevé en el que ningún partido tendrá una mayoría clara, puede ocurrir que el presidente de la Comisión sea alguien que hoy no es candidato.

Mi propuesta sería que los ciudadanos votaran dos listas, una paneuropea (en el que el jefe de cartel fuera el candidato a presidente), y otra local, en que los ciudadanos eligieran a los eurodiputados que además defendarán el interes territorial.

Según Eurostat, en la Unión Europea hay 25,7 millones de personas sin trabajo. De ellos, más de cinco millones son españoles. A su vez, el desempleo juvenil se encuentra por encima del 20%. ¿Cuáles son sus propuestas para reducir esta pandemia?

Mi propuesta es apostar sin duda alguna por las exportaciones como motor de creación de empleo. Cabe apoyar la patente única europea (de la que España se ha auto-excluido), reducir los costes del crédito a las PYMEs, incentivar la contratación, mantener la seguridad jurídica para atraer la inversión internacional, etc. Apoyando el crecimiento, quitando trabas a la creación de riqueza, generaremos oportunidades de empleo.

La supervivencia del euro parece hoy fuera de toda duda. ¿Su partido está de acuerdo con la arquitectura actual de la unión monetaria? En su caso, ¿cuáles son sus propuestas?

No. Queremos completar la unión bancaria (el mayor paso adelante en la integración europea des de la creación del euro) con una unión fiscal que permita la emisión de eurobonos, así como un presupuesto mayor para la Unión. Eso sí, cabe ser conscientes que tales propuestas deben contar también con el beneplácito de los ciudadanos pertenecientes a los países contribuyentes netos, y que la solidaridad debe venir acompañada de la responsabilidad y el cumplimiento de la norma de estabilidad presupuestaria.

La Troika ha sido un mecanismo de control estrictamente financiero y presupuestario cuya actuación ha resultado controvertida. ¿Mantienen ustedes el vigor de este modelo de supervisión? En su caso, ¿cuál sería su opción? ¿Consideran que tendría que haber un elemento de reequilibrio social a los recortes de los déficits presupuestarios?

Creemos que la Troika debería estar bajo el control democrático del Parlamento Europeo, y que dicha institución debería reconvertirse en un Fondo Monetario Europeo con métodos de trabajo más claros y transparentes.

Por otro lado, creemos que es fundamental para las futuras generaciones tener presupuestos equilibrados, y que la Comisión Europea tenga poder para señalar los desequilibrios internos de cada país. La verdad es que el alto grado de paro en el estado español se debe básicamente al estallido de la burbuja inmobiliaria, así como el maltrato que han recibido muchas PYMEs que han tenido que cerrar pese a ser solventes por culpa de la morosidad de las administraciones en el pago de servicios.

Europa carece de una política energética común. ¿Cuál es su modelo?

Queremos una Unión de la Energía, en que dejen de existir 28 islas energéticas en Europa, reduciendo los costes de la energia para empresas y particulares a la vez que reduciendo la dependencia de proveedores exteriores.

Europa ha iniciado la negociación de un tratado de libre comercio con EEUU. ¿Cuáles son los términos en los que debería apoyarse esta relación bilateral?

La Unión Europea no hará honor real a su nombre hasta que no exista una auténtica política exterior común. Creemos en un necesario proceso de supeditación de las políticas estatales a las políticas comunitarias que refuercen y promuevan el liderazgo europeo en cuestiones globales a partir del entendimiento entre les diferentes naciones europeas.

Asimismo, apoyaremos una negociación óptima de nuevos acuerdos de libre comercio con Estados Unidos y con otras áreas del mundo menos favorecidas y desarrolladas. Consideramos que el libre comercio es una de las claves para garantizar la paz y la prosperidad siempre y cuando se supedite a los organismos reguladores que acuerden los ciudadanos europeos a través de sus representantes en el Europarlamento.

El fenómeno de la inmigración se constituye en uno de los grandes problemas de Europa. ¿Cuáles son sus propuestas para hacer frente a esta situación?

No es una, es un conjunto. Desde garantizar los derechos y las vías legales para llegada de trabajadores extracomunitarios hasta la implicación europea en el desarrollo y progreso democrático del norte de África y el África subsahariana, pasando por la necesaria protección y promoción del bienestar de los ciudadanos europeos a través de políticas de seguridad respetuosas para con los derechos humanos.

El Tratado de Schengen ha sido uno de los mayores avances conseguidos en la historia de la integración europea. CiU está comprometida en mantener y promocionar dicho tratado tanto en la letra como, sobre todo, en el espíritu. Para ello, es necesario que los estados extiendan visados a aquellos ciudadanos europeos que vaya a trabajar a otros lugares de la UE.

En lo que se refiere a fronteras exteriores de la UE es necesario que los estados transfieran sus competencias de control de fronteras a la misma UE y que Europa los dote de forma suficiente para que exista un control efectivo de las fronteras de la Unión.

Dentro de la Unión Europea existen reivindicaciones de carácter nacionalista. ¿Cómo creen que debe afrontar Bruselas este hecho? ¿La estructura de la UE debe estar abierta a nuevas incorporaciones? En caso afirmativo, ¿cuál debería ser el criterio para aceptarlas?

Las constantes ampliaciones e incorporaciones a la Unión Europea demuestran que Europa es un ente político dinámico y con capacidad de entender y asumir las necesarias transformaciones de nuestro continente. Las instituciones políticas europeas son un árbitro conocido y reconocido dentro de las fronteras de la Unión y también en el resto del

mundo. Es necesario, pues, reforzar y consolidar su papel para facilitar que los cambios y transformaciones políticas surgidas dentro del territorio europeo tengan las necesarias garantías democráticas y cuenten, también, con el respaldo y la protección de la Unión y de todos los estados miembros. Entender la evolución política de Europa es creer en la idea primigenia de la Unión y es una garantía de su pervivencia y fortalecimiento durante el siglo XXI.

En el caso de Cataluña existe un proceso de transición nacional que es, a la vez, un proceso democrático, participativo y pacífico que debe ser validado en las urnas a través de una consulta que tenemos prevista para el próximo 9 de noviembre. Esperamos de Europa y de todos los estados miembros -como no podría ser de otra manera- no sólo el respeto al legítimo derecho a decidir de la sociedad catalana, sino su protección y reconocimiento.

Gran Bretaña mantiene su moneda, no acepta una parte importante de la legislación comunitaria, cuenta con el mercado financiero-bancario más grande de Europa y el euroescepticismo de su población se encuentra al alza. ¿Qué tipo de relación habría que establecer con este país?

Cada Estado miembro define el modo de su participación en el modelo europeo de la Unión. Dicho esto, debe tenerse en cuenta que el futuro de la Unión va íntimamente ligado a la capacidad de todos sus miembros para adoptar políticas conjuntas en aquellos aspectos esenciales para los europeos y las europeas: educación, sanidad, trabajo, servicios sociales, política exterior… Dicha convergencia sólo es posible con un alto grado de compromiso europeo junto a una fuerte predisposición de cada una de las sociedades europeas.

El mayor reto de la ciudadanía británica con respecto a Europa es, probablemente, asumir las necesarias cesiones de soberanía para construir una Europa más fuerte y unida en la diversidad y en el respeto a todas las diferencias que enriquecen nuestro continente.

Los últimos estudios sobre el sentir ciudadano en España han demostrado que la corrupción ocupa un lugar privilegiado en la lista de problemas que preocupan a la sociedad. ¿Cuáles son sus propuestas para luchar contra ella?

Corresponde a los políticos y a las formaciones políticas superar la crisis de confianza para con la ciudadanía y realizar propuestas para hacerlo posible. En CiU estamos comprometidos con la regeneración democrática que permita superar este momento y recupere la necesaria credibilidad de la gestión y el servicio público.

Así pues, explicitamos nuestro compromiso contra cualquier forma de corrupción ya que perjudica al conjunto de la ciudadanía, ocasiona un grave deterioro en el funcionamiento de las instituciones públicas y provoca el alejamiento de la ciudadanía de la política. En el marco europeo es necesario que las instituciones comunitarias, los partidos políticos y sus representantes trabajen de forma activa en el fomento de la transparencia y la rendición de cuentas ante la ciudadanía. Así lo han hecho hasta el momento los eurodiputados de CiU y así continuará siendo puesto que la transparencia y la rendición de cuentas son las herramientas más eficaces para evitar la corrupción y acercar a los europeos y a las europeas a sus legítimos representantes.

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