El periodista riojano acusa al rotativo neoyorquino de haber manipulado por completo un artículo en el que habla de su destitución al frente de El Mundo. El ya exdirector del diario El Mundo, Pedro J. Ramírez, ha pedido a primera hora de la mañana a The New York Times que retire de su página web un artículo firmado por él en el que acusa a Mariano Rajoy de su destitución. La petición la ha hecho a través de la web del diario de Unidad Editorial.
Una de las cosas que más parecen haber molestado a Pedro J. es el cambio de un titular completamente plano (‘Otra vez en las fauces del poder’) por otro más periodístico (‘En España, despedido por hablar claro’).
Este es el título que lleva el texto en el que el periodista riojano habla de su destitución al frente del diario de Unidad Editorial. En su cuenta de Twitter, Pedro J. ha explicado que se ha manipulado «desde el título hasta el último párrafo».
«Acaba de ocurrirme algo inaudito. The New York Times me pidió un artículo sobre mi destitución. Lo escribí y lo envié. Recibí la traducción. Con matices me pareció correcta. La aprobé. Pero ellos lo han reescrito por completo, cambiando desde el título hasta el último párrafo. Lo han dejado irreconocible y lo han publicado sin mi autorización. Acabo de pedir que lo retiren de la web”, aseguraba el famoso periodista hacia las nueve de la mañana en la red social. Al mediodía, el rotativo de EEUU aún no había rectificado.
En su artículo, Pedro J. Ramírez acusa abiertamente al Gobierno que preside Mariano Rajoy de llevar la libertad de prensa a su estado más frágil desde la dictadura franquista mientras recorre sus tres últimas décadas en la profesión, detallando algunas de las investigaciones destapadas bajo su mando al frente de un periódico como, por ejemplo, el caso de los GAL.
The New York Times ya informó a sus lectores el pasado fin de semana de la destitución sufrida por Pedro J. Ramírez al frente de El Mundo. El artículo explicaba las tensiones surgidas entre el Gobierno y el medio de comunicación a raíz del ‘caso Bárcenas’ pero también los problemas financieros que arrastraba el periódico de Unidad Editorial.
