Cáritas de Barcelona se enfrenta a Rouco Varela

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Cáritas de Barcelona se enfrenta a Rouco Varela

Rouco Varela

Las palabras de Antonio María Rocuo Varela, que alertó del resentimiento de la acción de Cáritas si la Iglesia debe pagar el IBI, siguen dando que hablar. La diócesis de Barcelona de esta organización ha desmentido al presidente de la Conferencia Episcopal al asegurar que el 90% del dinero que reciben procede de donativos particulares.

Parece que la acción caritativa y social de la Iglesia no estaría en peligro si la institución empieza a pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), tal y como han solicitado varios ayuntamientos de Madrid y Castilla y León Gobernados por el PP. Al menos así lo ha asegurado el presidente de Cáritas Diocesana de Barcelona, Jordi Roglà, quien ha rebatido a la alarma creada por Rouco Varela al asegurar que ellos continuarán haciendo la misma tarea porque han salido siempre “adelante gracias a la solidaridad y a la generosidad de la gente”.

Concretamente, Roglà ha indicado que el 90% del dinero que reciben en Cáritas Barcelona proviene de donativos particulares. Es más, la aportación extraordinaria que hace la Conferencia Episcopal es sólo del 2%, unos 200.000 euros al año, según recoge TV3.

Además, el Obispado de Barcelona aporta otra cantidad, que este ejercicio ha ascendido a 15 millones de euros, que contribuye a favorecer la acción de Cáritas en la Ciudad Condal, donde ayudan con ropa y comida a unas 150.000 personas.

La crisis que afecta a España ha obligado a la Iglesia a apretarse el cinturón y a replantearse su política económica. Así lo ha explicado el delegado de Economía del Obispado de Barcelona, Antoni Matabosch, quien ha indicado que intentan no gastar en nada que no sea imprescindible para no verse obligados a recortar los servicios sociales. “Si no podemos hacer una iglesia nueva, no la hacemos, o si no podemos reparar una obra que no es urgente, no lo hacemos”.

No obstante, el principal problema para la Iglesia es el mantenimiento de su patrimonio, un desembolso que sería mayor si tienen que enfrentar el pago del IBI. Por ello, ya han surgido voces críticas en Barcelona que instan a la institución a deshacerse de pisos en desuso o conventos vacíos y dejarse de lujos.

Uno de ellos ha sido el cura catalán Mossèn Lluís Costa, quien ha asegurado que “damos lecciones a los demás y nosotros no las acabamos de cumplir. Seamos coherentes: ya que tenemos estos principios, pongámonos de una vez a cumplirlos radicalmente”.

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