El portavoz de la coalición Bildu y secretario general de Eusko Alkartasuna, Pello Urizar, ha asegurado que «es imposible que encuentren pruebas para impugnar las listas electorales» de la agrupación y que «hay más razones políticas que judiciales» para anular sus candidaturas.
Pello Urizar ha ofrecido hoy en Pamplona una rueda de prensa para presentar el documento del Aberri Eguna (día de la patria vasca que se realiza el Domingo de Resurrección), con la participación de los portavoces de Bildu Aitziber Sarasola, Maiorga Ramírez y Oskar Matute. Urizar ha declarado que «hay un compromiso claro por parte de todas las personas que van a conformar las diferentes listas de Bildu , por realizar todo el recorrido político a través de las vías políticas y pacíficas, con un compromiso claro en contra de las acciones violentas».
Ha continuado que «se pueden encontrar mil razones para impugnar las listas, pero pruebas ninguna» y se ha referido a la decisión del Tribunal Supremo de rechazar el registro de Sortu alegando que «ley y justicia no es o mismo», debido a que la mitad de los magistrados estaban de acuerdo con el registro de Sortu.
Urizar ha destacado que existen más razones políticas que judiciales ya que el Gobierno sabe que «esta apuesta va en serio y que cambiará la situación política de este país».
Bildu presenta hoy 300 listas en el País Vasco y Navarra, de las que más de 50 ya han sido registradas en esta última y se espera que este número vaya en aumento a lo largo del día, afirmaba Maiorga Ramírez.
En relación a una posible negociación para alcanzar la paz entre ETA y el Gobierno, Óscar Matute ha declarado que «no parece que las declaraciones de Rubalcaba no sean interesadas ni ajenas a una lectura política de los tiempos que viene haciendo el Partido Socialista». También ha afirmado que la situación es mejor que la de hace dos años y pide a la ciudadanía vasca más respeto y que no «alimenten discursos que saben que no se asemejan a la realidad».
Por último, Matute ha dicho que «España ha entrado en un tiempo de cambio político y social, en una superación del conflicto violento por vías democráticas que será lenta, pero que cuenta con una mejor situación que hace dos años».
