La funcionaria del Ayuntamiento de Boadilla del Monte ha sido denunciada por una concejal del mismo consistorio. Ana Garrido, una de las testigo clave del caso Gürtel, ha sido imputada por un presunto delito de infidelidad en la custodia de documentos, según informa El Español. La funcionaria del Ayuntamiento de Boadilla del Monte, epicentro de la trama de corrupción en el seno del PP, ha sido denunciada por sustraer papeles de carácter secreto del mismo consistorio.
Según el mismo medio, la denuncia procede de la concejal de Hacienda, Comercio y Economía y la cuarta teniente alcalde de Boadilla del Monte, María del Mar Paños. Esta concejal acusa a Garrido de extraer, y reponer después, cierta documentación del Ayuntamiento de carácter reservado.
La funcionaria fue la persona que presentó una grabación en la que la ex secretaria de Francisco Correa, cerebro de la trama, implicaba al presidente del Senado, Pío García Escudero, afirmando que“estaba en el ajo”. Tras salir a la luz estas escuchas, el presidente del Senado hizo un comunicado en el que aseguraba que el contenido era falso y anunciaba acciones legales en defensa de su honor.
Más tarde, la secretaria grabada por Garrido, Maica Jiménez, desmintió todas sus afirmaciones ante el juzgado y aseguró que nunca vio a Luis Bárcenas, extesorero del PP, salir con sobres a “altas horas de la noche” como sostuvo en su conversación con Ana Garrido.
La funcionaria denunció al consistorio por acoso laboral, o mobbing, y la justicia le dio la razón condenando al Ayuntamiento de Boadilla del Monte a extinguir el contrato laboral con una indemnización de 81.437 euros más otros 14.887 “por daño moral”. El juez no valoró las explicaciones de los responsables municipales sobre las razones por las que se obstaculizó el trabajo de Garrido y dio por probado que su responsable directo, el concejal Adolfo Arias Javaloyes, le advirtió de que “se lo iban a hacer pasar mal”.
