El grupo ‘La Trapa’ acumula un déficit de 123 millones de euros. El propietario de la desaparecida Nueva Rumasa, José María Ruiz-Mateos y Jiménez de Tejada, ha sido inhabilitado para trabajar en cargos administrativos durante 15 años por la sentencia judicial que le declara culpable de la entrada en concurso de acreedores del grupo La Trapa, que acumula un déficit de más de 123 millones de euros.
El juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Palencia ha decretado así el fin del proceso iniciado en 2011, añadiendo al fallo que el empresario jerezano y Santiago Agustín Hernández, uno de los administradores de la compañía que también han sido penados con la inhabilitación, deben pagar de forma solidaria a los acreedores de la masa y concursales de Mitelman, S.L. el total importe que de sus créditos no perciban en la liquidación de la masa activa de dicha mercantil.
Del mismo modo, Ruiz-Mateos y María Susana Álvarez Ampuero, otra de las halladas culpables por gestión de las empresas de Nueva Rumasa, deberán responder por Soluciones Comerciales Trapa, S.L. y de Productora de Chocolates, S.L., que tienen un déficit de 93,3 y 8,2 millones de euros respectivamente, y junto a Edwin Salvador Cortez Beltrán, también declarado culpable, deberán hacer frente a Brookfield Promociones 21, S.L., que cargan con una deuda de 5,2 millones de euros.
Así, la sentencia recoge que la situación de insolvencia que sufren todas las empresas de este grupo ha sido fruto de la conducta de los administradores, “pues el incumplimiento de las obligaciones contables y el afianzamiento masivo han determinado que el grupo Trapa asumiera obligaciones o deudas vinculadas a los intereses del grupo Nueva Rumasa, sin que se haya justificado la razón de tales garantías, ocasionando un claro perjuicio patrimonial a las cuatro mercantiles afectadas, que han visto notablemente disminuida su masa activa”.
