La cotización del euro frente al dólar ha caído a cifras de hace dos años en su encuentro con el dólar y a un mínimo de seis semanas en su cruce con el yen antes de conocerse los datos de la inflación europea de junio y la confianza del consumidor de Alemania.
De hecho, el euro se ha reducido un 0,7% hasta los 96,33 yenes después de haber caído a 96,17 yenes el 12 de julio, la cota más baja desde el pasado uno de junio. En su encuentro con el billete verde, la moneda única ha caído un 0,2% hasta los 1,2228 dólares. El viernes pasado, se deslizó hasta los 1,2163 dólares, la caída más pronunciada desde junio de 2010. Mientras tanto el yen ha avanzado un 0,5% hasta las 78,76unidades por dólar.
Según el estratega de divisas de Barclays Nueva York, Aroop Chatterjee, “los inversores siguen huyendo de los activos en euros y de los países europeos, especialmente de los de la periferia”. Ha añadido también que la política del Viejo Continente “ha sido bastante eficaz”.
Después de conocerse los datos de ventas minoristas en EEUU, el dólar ha recortado su distancia con la moneda común. El yen, mientras tanto ha avanzado contra todos sus compañeros.
