Como suele suceder en el mercado de divisas, las bajadas del dólar y el yen suelen estar vinculadas con la salida de los inversores de esos divisas, que actúan como valores refugio, para entrar en inversiones que otorgan mayor rentabilidad. Hoy ha sido un buen día para la renta variable, con el Dow Jones superando los 9.000 puntos por primera vez desde enero, por lo que los inversores vendían salían de sus apuestas por las divisas para entrar en la renta variable. Los resultados de las compañías de EEUU hacían pensar en una recuperación económica.
En concreto, el yen baja un 1,4% frente al euro hasta un cambio de 135,02 unidades de la divisa nipona por cada euro. El dólar, por su parte, también bajaba frente a la divisa comunitaria: un 0,3% hasta el cambio de 1,4231 dólares por euro.
El real brasileño, por su parte, subía un 0,2% frente al dólar después de que las autoridades monetarias brasileñas hayan bajado los tipos de interés de la divisa carioca hasta el 8,75%, una cota históricamente baja para la economía del país que preside Lula.
