El PMI Compuesto de la zona del euro muestra su segunda peor lectura del año y vuelve a generar dudas sobre la economía europea. Poco le ha durado la tregua a un Ibex 35 en el que la volatilidad es la nota dominante. Si a primera hora de la mañana volvía a apostar por los avances después de que el duro castigo sufrido ayer le haya situado ya con balance negativo en el acumulado del año, los inversores volvían a sucumbir al pesimismo tras conocerse las cifras del PMI manufacturero alemán, que se suman a la creciente preocupación sobre Rusia.
A media mañana, el Ibex 35 retrocedía un 0,81% hasta situarse en apenas 9.823 puntos después de haber llegado a caer casi un 2% minutos después de conocerse las cifras del PMI de la eurozona.
El Flash del Índice PMI Compuesto de la Actividad Total de la Zona Euro de Markit aumentó de la mínima de los seis últimos meses registrada en noviembre, 51,1 puntos, a 51,7 en diciembre, señalando una modesta mejora del ritmo de crecimiento. No obstante, es la segunda peor lectura en los últimos doce meses, llevando a la lectura media del cuarto trimestre a sus mínimos desde el tercer trimestre de 2013.
El PMI de manufacturas francés bajó de 48,4 a 47,9, mínimos de cuatro meses, cuando se esperaba 48,6, aunque el de servicios subió de 47,9 a 49,8 cuando se esperaba 48,3, en este caso máximos, también de cuatro meses.
En Alemania, el PMI manufacturero subió de 49,5 a 51,2, por encima de las estimaciones de los expertos (50,4). El índice de servicios bajó de 52,1 a 51,4, la peor lectura en un año y medio, cuando el mercado había augurado 52,5.
Sobre la cotización de la Bolsa se deja notar también la preocupación sobre Rusia. A pesar de la agresiva subida de tipos anunciada por el banco central ruso hasta el 17%, el parqué moscovita ha llegado a desplomarse esta mañana un 11%.
