La prensa conservadora insiste en poner la diana en dos objetivos: Manuel Chaves y familia y Baltasar Garzón. El Mundo sigue empeñado en desvelar presuntas irregularidades en el comportamiento de Iván Chaves, hijo del vicepresidente tercero. En esta ocasión, asegura que cobró comisiones por informes que pagó la Junta de Andalucía cuando la presidía su padre. Abc sigue el mismo camino al informar de que el Gobierno andaluz impulsó la construcción de un campo de golf en Jaén después de que el hijo de Chaves firmara un contrato con la promotora del proyecto. Sólo La Razón se desmarca de este ‘seguimiento’ y se limita a publicar la entrevista que ayer le hizo la SER al ex presidente de la Junta en la que admite que “algo habremos hechos mal” y en la que defiende la legalidad de las actividades de su familia. Por cierto que este diario destaca en portada cómo Vocento, grupo que edita su principal competidor, Abc, ha disparado su deuda y ha aumentado sus pérdidas.
El periódico de Vocento destaca en su primera, como no podía ser de otra manera, a Esperanza Aguirre. No en vano, ayer fue protagonista del Foro Abc, donde además de señalar que “ha llegado la hora de un cambio radical en España” anunció que ofrecerá a todos los institutos un aula para lo que denomina ‘Bachillerato de la Exigencia’. Por otro lado, este diario dedica un duro editorial a Baltasar Garzón, a quien advierte que “a pesar de la coraza mediático-política que pretende protegerlo (…) la gravedad de los hechos por los que está acusado es sobre el personaje una enmienda a la totalidad”.
Todo lo contrario de lo que opina El País que, además de señalar que la querella contra el juez por las escuchas del ‘Gürtel’ “es tan forzada como las otras dos”, sostiene que la rapidez de su tramitación por parte del Supremo “plantea la duda de si no habrían sido rechazadas de no ser Garzón el querellado y ser otros los querellantes”. Por otro lado, el diario de Prisa asegura que “Batasuna acelera su ruptura con ETA ante el temor a un atentado”.
