Japón protagoniza las portadas y la prensa se hace eco de l

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Japón protagoniza las portadas y la prensa se hace eco de l

Japón protagoniza las portadas y la prensa se hace eco de la lucha desesperada del Gobierno nipón para evitar un desastre nuclear, tras el terremoto y el tsunami que asolaron el viernes el país. Los titulares destilan alarma y preocupación: “Japón teme el desastre nuclear”, apunta El País; “Japón lucha contrarreloj para evitar su Chernobil” destaca El Mundo mientras que Abc se hace eco de las declaraciones del primer ministro japonés, Naoto Kan, de que la situación provocada por el seísmo es “la peor crisis desde 1945” que ha vivido su país, la más grave desde la Segunda Guerra Mundial, aunque quizá las frases más alarmistas puedan leerse en el editorial de Pedrojota que concluye “Japón ha quedado arrasado por las fuerzas de la naturaleza, pero ahora falta por saber si va a resistir el impacto de este segundo tsunami nuclear que podría ser peor aún que el provocado por el seísmo”.

Otra de las consecuencias de esta catástrofe es que ha reabierto el debate sobre la energía nuclear, cuyo uso “será sometido a nuevo examen dentro y fuera de Japón” tal y como recalca El País, que advierte que “las consecuencias para la economía mundial pueden ser significativas en una coyuntura como la actual, en la que los principales productores de combustibles fósiles atraviesan un momento de grave inestabilidad política que se refleja en los precios”.

La tragedia que vive Japón no impide que El Mundo y La Razón lleven sus encuestas a primera, que para eso es lunes, y además sobre el mismo tema: la sucesión de Zapatero. Del sondeo publicado para el diario de Planeta se desprende que el 74,3% de los 1.000 españoles consultados pide que ZP anuncie de una vez si será o no el candidato, y lo mismo que en el sondeo de El Mundo, para los encuestados Rubalcaba es el favorito en la carrera sucesoria.

Para acabar la puntilla la da El País que revela que el PSOE programa los actos electorales de Zapatero a ciegas porque el comité de campaña no tiene ni idea de lo que quiere el presidente. Pues estamos apañados con tanto misterio y tanta incertidumbre.

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