La prensa conservadora se ha tomado mal, pero que muy mal, las palabras de Zapatero de que los parados que realizan cursos de formación “trabajan por su país”. Abc califica de “chocante” el análisis del presidente del Gobierno y lo considera “ofensivo para miles de parados que con gusto cambiaran esos cursos por un empleo”, además de catalogar la frase de “inverosímil en boca de un jefe de Gobierno que tiene sobre sus espaldas la tasa de paro más alta de la Unión Europea”. En la misma línea, Pedrojota Ramírez ironiza en su editorial que “España necesita trabajadores… que trabajen” y arrima el ascua a su sardina al relacionarlo con los liberados “que hacen del sindicalismo su profesión y dejan de trabajar, es decir de producir”, por lo que califica de valiente la decisión de Esperanza Aguirre de prescindir de dos tercios de esas personas que viven “del cuento sindical” y propone que su puesto lo ocupen “algunos de los muchos ciudadanos dispuestos a trabajar de verdad”. El hecho de que El País no haga sangre con la frase de Zapatero, que considera una “encendida defensa de la formación como la reforma pendiente en el mercado laboral español” no significa que el diario de Prisa no denuncie la gravedad de la situación económica de España, ya que abre edición con las previsiones que ayer publicó la Comisión Europea “en las que se acentúa la brecha entre los líderes de la recuperación económica (Alemania y Polonia) y los más rezagados, como es el caso de España”, a la que pronostica una caída en el tercer trimestre”.
Sin embargo el PP no se va de rositas, por lo menos en las portadas de El País y Público que denuncian que deje sin castigo a los imputados en casos de corrupción que tiene en la Comunidad valenciana, es decir, Camps, Fabra y Ripoll. Y es que, como dice El País, Rajoy está ocupado “en sacar partido a las decisiones impopulares sobre pensiones o sobre subsidios de desempleo que el Gobierno está apuntando”.
