La junta directiva de la cadena británica Marks & Spencer (M&S) ha decidido no llevar a cabo el pago del dividendo final correspondiente al actual ejercicio, así como aplazar cualquier subida de los salarios y reducir o cancelar los gastos no esenciales de la compañía para hacer frente al impacto de la epidemia de coronavirus en su actividad, anticipando un fuerte efecto negativo en el segmento de ropa y hogar, mientras que confía en un buen desempeño del área de alimentación.
«En las actuales circunstancias, la junta no prevé realizar un pago final de dividendos para este ejercicio financiero, lo que resulta en un ahorro de efectivo previsto de aproximadamente 130 millones de libras (142 millones de euros) «, explicó la compañía.
La multinacional ha advertido de que «no es posible proporcionar una orientación significativa sobre los resultados» ante la previsión de que sus negocios de Ropa y Hogar, así como la actividad de su negocio internacional, se verán «gravemente afectados» en el transcurso de los próximos 9 a 12 meses.
En este sentido, M&S ha advertido de que está registrando «importantes caídas en las ventas de Ropa y Hogar», por lo que la compañía deberá administrar sus costes en consecuencia, aunque confía en poder redistribuir un número significativo de trabajadores en el negocio de Alimentación.
«Nos estamos preparando para la contingencia de un cierre temporal de algunas tiendas», ha indicado la compañía, que no espera un retorno a la normalidad del negocio antes del otoño, mientras que confía en que el segmento de alimentación seguirá siendo rentable durante este periodo, puesto que «el cambio significativo a comer en casa debería continuar beneficiando las ventas en los próximos meses».
En el caso de su negocio internacional, M&S prevé reducciones significativas de las ventas a medida que varios mercados en los que opera se ven afectados negativamente por los brotes locales del virus y, en ocasiones por cierres.
En este sentido, la multinacional ha decidido retrasar en la medida de lo posible sus inversiones y gastos, habiendo comprometido hasta la fecha únicamente 80 millones de libras (88 millones de euros) para el ejercicio 2020/21 de un presupuesto de hasta 400 millones de libras (439 millones de euros), mientras que «aplazará todos los aumentos salariales» y congelará todas las contrataciones no esenciales y el gasto en marketing.
