Por el momento las autoridades cubanas sólo han liberado a los prisioneros que han aceptado ser trasladados a España. Los últimos en salir de la cárcel han sido seis presos políticos cubanos que forman parte de los 52 detenidos que quedan de los 75 que fueron metidos entre rejas durante la Primavera Negra de 2003. Así se ha comunicado desde el Arzobispado de La Habana, en donde además se asegura que las 6 personas han aceptado viajar hacia la península Ibérica, para salir de su encierro.
El hecho de que sólo salgan los presidiarios que acepten viajar hacia España puede llegar a cambiar, ya que EEUU se ha mostrado favorable a aceptar la entrada de algún preso, aunque estudiará caso por caso. La semana pasada la prensa publicaba al respecto que la secretaria de Estado de este país norteamericano, Hillary Clinton, había manifestado la disposición de Washington de acoger a los excarcelados cubanos que muestren el deseo de ir a EEUU, ahora parece que hay más inconvenientes ya que revisarán todos los casos.
Los seis liberados serán trasladados a España próximamente, donde ya se encuentran 26 ex presos políticos puestos en libertad. Los excarcelados son Víctor Arroyo Carmona, del Movimiento Todos Unidos, Leonel Grave de Peralta Almenares, bibliotecario, Próspero Gainza Agüero, del Movimiento de Resistencia Cívica Pedro Luis Boitell, y Claro Sánchez Altarriba, periodista.
Precisamente desde hoy y hasta el viernes se encuentra en La Habana el gobernador del estado de Nuevo México, Bill Richardson. Según un comunicado oficial, la visita, la segunda que realiza Richardson a Cuba desde el verano de 2009, tiene un objetivo comercial.
Pero este propósito esconde otro, ya que EEUU, a través de su Departamento de Estado, ha pedido al gobernador de Nuevo México que reclame a las autoridades cubanas, durante su visita a la Isla, , la liberación de Alan Gross, un ciudadano estadounidense acusado de espiar para Washington.
