«Las emisiones globales de CO2 se contrajeron un 5,9 por ciento debido al recorte del consumo de energía que el año pasado bajó prácticamente un 4 por ciento», indicó el organismo.
En términos absolutos, la disminución fue de casi 2.000 millones de toneladas de CO2, el principal gas de efecto invernadero, lo que equivale a las emisiones que genera la Unión Europea en un año.
En la generación de electricidad se redujeron las emisiones en un 3,3 por ciento (o en 450 millones de toneladas), lo que constituye la mayor caída en términos absolutos y relativos en la historia
La caída de la demanda de petróleo en 8,6 por ciento fue la mayor en la historia. La mitad de la disminución de las emisiones correspondió a la combustión de crudo y es que el CO2 provocado por esta actividad pasó de 11.400 millones de toneladas en 2019 a 10.300 millones en 2020.
Rusia contribuyó a esa disminución con 70 millones de toneladas de CO2, Estados Unidos con 500 millones, la Unión Europea con 250 millones y la India con 150 millones de toneladas. China, por el contrario, registró un aumento de las emisiones de dióxido de carbono.
«En la generación de electricidad se redujeron las emisiones en un 3,3 por ciento (o en 450 millones de toneladas), lo que constituye la mayor caída en términos absolutos y relativos en la historia», señaló el organismo.
