La prima de riesgo ofrecida a los inversores en bonos españoles con vencimiento a diez años en comparación con sus homólogos alemanes ha perdido fuerza durante este miércoles, hasta llegar a situarse en los 144 puntos básicos, frente a los 161 enteros que ha llegado a tocar.
El diferencial ha llegado a situarse en máximos de 2017 hacia la media sesión, cuando se ha situado en los 161 puntos básicos, después del anuncio del Gobierno de las medidas de estímulo para abordar la crisis del coronavirus y ante la falta de unión en los mensajes de los banqueros centrales de la eurozona sobre la capacidad de intervención del BCE.
En el caso del bono español con vencimiento a una década, la rentabilidad ofrecida a los inversores se ha situado en el 1,241%, alejándose del máximo de 1,367% que ha llegado a rozar durante la sesión. De su lado, el ‘bund’ ha registrado un interés del -0,221%, frente al -0,383% registrado en la apertura.
Asimismo, la subida de los costes de financiación también eran llamativos en el caso de Italia, cuyo bono a diez años llegaba a ofrecer una rentabilidad del 3,012%, aunque se relajaba posteriormente al 2,439%, después de despedir la jornada de ayer en el 2,346%.
De este modo, la prima de riesgo italiana se ha desinflado, al registrar 266 puntos básicos, desde los más de 300 en los que ha llegado a situarse durante la sesión. Esta tendencia destaca por los intentos del Banco Central Europeo (BCE) de minimizar el impacto de las palabras de Christine Lagarde en la rueda de prensa del pasado jueves, que alimentaron el temor a la fragmentación de las primas de riesgo en la eurozona.
