AIG, la aseguradora estadounidense que tuvo que ser rescatada por el Gobierno, ha vendido su participación de un 97,57% en su filial taiwanesa Nan Shan Life a un consorcio formado por el holding hongkonés Primus y China Strategic Holdings.
La operación, que asciende a 2.150 millones de dólares (unos 1.500 millones de euros), ayudará a la compañía a devolver parte de las ayudas recibidas.
AIG está controlada en un 80% por el Estado tras recibir 182.000 millones de dólares en ayudas públicas del plan de rescate financiero aprobado el pasado otoño, y ahora se encuentra inmersa en un plan de desinversiones que le permita la devolución de todos los fondos a los contribuyentes.
“Estamos encantados de haber encontrado un comprador que comparte nuestra confianza en el brillante futuro de Nan Shan”, según ha dicho Robert Benmosche, consejero delegado de AIG.