El Fondo Monetario Internacional alaba la fortaleza de la banca japonesa

Internacional

El Fondo Monetario Internacional alaba la fortaleza de la banca japonesa

La banca japonesa aparece como una de las grandes ganadoras del sector financiero mundial, al ser, dentro de las grandes economías, la que ha requerido un menor apoyo por parte de su Gobierno para poder salir adelante en la actual crisis. Así se desprende del último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI), según el cual el país asiático apenas ha dedicado a la recapitalización de sus bancos un 0,02% de su PIB, sin ninguna otra ayuda adicional.

Los Gobiernos de la zona del euro, entre tanto, han tenido que gastar el correspondiente a un 18,7% del PIB de la región común para sacar adelante sus respectivos sistemas financieros. Sólo los fondos destinados a las recapitalizaciones han alcanzado una cifra comparables al 1,82% del PIB europeo. El país que ha tenido que realizar un mayor esfuerzo es Reino Unido, que ha gastado una cifra similar al 52% de su PIB para rescatar a su banca, sobre todo mediante la compra de activos (38,89%).

La banca japonesa se ha posicionado ahora como una de las más fuertes del escenario internacional tras la profunda reestructuración que tuvo que llevar a cabo en los últimos años debido a la crisis gestada hace ahora una década, y que obligó a una fuerte reducción de los nuevos créditos, a la supresión de la mayoría de los créditos dudosos y a una política de recorte de gastos.

En ese período, las entidades japonesas se vieron obligadas a abandonar en gran medida sus planes exteriores y se concentraron en el negocio doméstico. Sin embargo, en la actual crisis han aprovechado para ampliar mercados, a costa sobre todo de las firmas estadounidenses. El primer movimiento lo realizó Nomura, que en septiembre de 2008 adquirió los activos europeos y asiáticos del malogrado Lehman Brothers por unos 225 millones de dólares.

No es la única operación internacional que ha realizado un banco japonés. Mitsubishi UFJ Financial se convirtió en octubre de 2008 en el mayor accionista de Morgan Stanley tras pagar 9.000 millones de dólares por el 21% de él. La adquisición se realizó en acciones preferentes y otorga a la entidad japonesa un puesto en el consejo.

Más información