Esta es una de las conclusiones del Barómetro del Consumidor Sénior realizado por la Fundación Mapfre junto a Google para “conocer los hábitos de los más de 16 millones de españoles que superan los 55 años”. Según este estudio, la importancia de este colectivo, al que denomina como ‘generación silver’, “como red de apoyo ha aumentado”.
De esta manera, el 63% de los más de 55 años ayuda económicamente a miembros de su familia o personas de su entorno cercano, “lo que supone un incremento significativo con respecto a 2021”. Entonces el dato era un 20% menor. El porcentaje llega hasta el 67% en el rango de entre 66 y 70 años de edad.
“Mientras que en 2021 el 12% aseguraba que las ayudas eran vitales para quienes las recibían, en la actualidad baja hasta el 8%”, recoge este barómetro, que detalla que “también disminuye el porcentaje de los que hacen aportaciones todos los meses, pasando del 16%, al 14%”. Sin embargo, sube el porcentaje de aquellos que las realizan “esporádicamente”, siendo del 4% en 2021 y del 25% en 2022.
Asimismo, la mitad de la población mayor de 55 (el 51%) cree que su situación con respecto a las ayudas económicas a su entorno se mantendrá igual. “No obstante, son más quienes creen que tendrán que ayudar menos a sus seres cercanos en un futuro (29%), que los que opinan que su apoyo deberá ser mayor (20%)”, apunta.
Respecto a la posibilidad de ahorrar a final de mes, su capacidad para hacerlo ha caído. El porcentaje de población a partir de esta edad que consigue ahorrar cuando el mes llega a su fin es del 43%, lo que “confirma el descenso experimentado en 2022 en relación a 2021 (48%) y 2020 (56%)”.
Sobre su situación económica “dado el contexto actual”, el 55% se muestra inseguro. Además, tres de cada cuatro sienten que el precio actual de la energía “es un riesgo para su estilo de vida”, recoge este estudio, mientras que uno de cada dos lo percibe respecto a los alimentos y bebidas no alcohólicas.
