Cursar estudios universitarios es un 22,3% más caro que hace un año, según las cifras de inflación publicadas hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que muestran que los productos que más incrementaron sus precios fueron las patatas y sus preparados, con una subida del 37,3%, y los aceites y grasas (+23,9%).
Por el contrario, los descensos anuales más significativos se registraron en los precios de las comunicaciones (-3,4%), los objetos recreativos (-3,4%) y la calefacción, alumbrado y distribución de agua (-2,5%).
La tasa anual del Índice de Precios de Consumo (IPC) general en el mes de julio se situó en el 1,8%, tres décimas por debajo de la registrada el mes anterior, según las cifras publicadas hoy por el INE.
Los grupos con mayor influencia en esta caída fueron, según el instituto estadístico, los artículos de medicina, con una tasa del 3,7%, casi 10 puntos inferior a la del mes de junio debido, principalmente, a que la subida de los precios de los medicamentos y otros productos farmacéuticos ha sido menor este mes que la registrada el año pasado.
Los gastos del hogar disminuyeron más de un punto hasta el –0,7%, a causa del menor incremento de los precios de la electricidad respecto a 2012. También influyó el mantenimiento de los precios del gas frente a la subida registrada en julio del pasado año.
También cayó el componente del transporte, con una tasa del 1,4%, tres décimas por debajo de la del mes pasado, consecuencia de que los precios de los carburantes y lubricantes y, en menor medida, del transporte aéreo han subido menos este mes que en 2012.
Sin embargo, los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas subieron siete décimas respecto a junio hasta una tasa del 4,4%. En este comportamiento destaca la subida de los precios de las frutas frescas, frente a la bajada experimentada en 2012, señala el INE.
El componente de bebidas alcohólicas y tabaco subió casi dos puntos debido a la subida de los precios del tabaco.
La tasa de variación anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) disminuye tres décimas hasta el 1,7%, con lo que continúa una décima por debajo del IPC general.
En su tasa mensual, el IPC bajó un 0,5% gracias especialmente a la caída en los precios del calzado y el vestido, y del menaje. Por el contrario, los alimentos y bebidas no alcohólicas subieron un 0,6% y una repercusión de 0,103.
