Los resultados de Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) repiten la tónica del sector: menores beneficios por provisiones y aumento de la morosidad.
La caja valenciana redujo un 32% su beneficio atribuido hasta los 127,3 millones de euros durante el primer semestre del año tras realizar dotaciones “con carácter prudencial y voluntario” de 112 millones de euros, anunció hoy la entidad. La tasa de mora al cierre de junio alcanzó el 5,76%, desde el 4,89% de marzo.