“El actual modelo productivo no sirve. Falta tecnología, innovación y formación”. Esta frase se ha convertido desde que estalló la crisis económica en el lema del Gobierno, oposición, empresarios y expertos. Pero lo cierto es que el nuevo modelo no arranca. Un dato: el 38% de las empresas que se crearon en España en el primer semestre del año se concentraron en el sector del ‘ladrillo’ (constructoras e inmobiliarias).
De las 28.099 compañías nuevas, esta industria acaparó 10.580, si bien esta cifra supone una caída del 42% con respecto al mismo período de 2008. Mientras, el sector del comercio al por mayor y al por menor ha creado 8.775 empresas, el 31,1% del total. La tendencia podría continuar.
Fuentes de Axesor, en declaraciones a EL BOLETÍN, han asegurado que aunque esperan que “la construcción siga encabezando los rankings de constituciones en adelante, aunque marcando las cifras más bajas de la última década”. La empresa recuerda que en los últimos años el sector ha conformado entre un 15% y un 20% del tejido societario activo en España, “por lo que es lógico que, en términos absolutos, este sector siga predominando en la creación de sociedades”.
El resto de cifras tampoco son muy alentadoras. A pesar de que la crisis se ha llevado por delante 1,3 millones de empleos en un año, según la Encuesta de Población Activa (EPA), y de que en países como Francia o Reino Unido, con más innovación, la destrucción de empleo ha sido muy inferior, el cambio va demasiado lento.
En I+D+i, España está creciendo más que el promedio de Europa, aunque todavía hay una gran brecha. El año pasado, nuestro país destino a este concepto el 1,27% de la riqueza generada (13.342 millones de euros), según la Fundación para la Innovación Tecnológica Cotec. En 2000, este porcentaje sólo representaba el 0,91% del Producto Interior Bruto (PIB). Pero las cifras palidecen frente a otros países de nuestro entorno. La media de la zona del euro destina el 1,86% de su PIB a I+D+i, 56 puntos básicos más que suponen una diferencia de 6.000 millones de euros al año. Para igualar a Francia el esfuerzo debería ser aún mayor. El país vecino destina el 2,08% de su PIB a I+D+i; y aún más en el caso de Alemania, que destina el 2,53%, según los datos ofrecidos por Eurostat, la oficina de estadística comunitaria.
Los ajustes a la baja en el precio y los mínimos históricos del Euríbor no han impedido que durante el mes de mayo la compraventa de viviendas en España cayera otro 32,2%, según los datos del INE. Sin embargo, el pinchazo del mercado se ha atenuado ligeramente. En abril la compraventa de viviendas venía de registrar la mayor caída de la historia, un 47,6%. En mayo, el descenso alcanzó el 34,9% en viviendas de segunda mano y el 29,4% en las nuevas.
