La Comisión Europea ha iniciado hoy una investigación, en la que participarán los reguladores de Telecomunicaciones de todos los Estados miembro, para destapar las infracciones de los proveedores de Internet. Bruselas quiere sancionar a los operadores que bloqueen aplicaciones web y que reduzcan indebidamente la velocidad de determinados servicios.
Aunque este no será el único fin de la investigación. Según recoge Europa Press, la vicepresidenta de la Comisión y responsable del área de Telecomunicaciones, Neelie Kroes, ha señalado que el organismo comunitario pretende examinar también si la velocidad de la conexión que ofrecen los proveedores se corresponden con lo contratado, además de ver si existe algún obstáculo para cambiarse de compañía con facilidad.
Todo ello, según Kroes, conforme a las nuevas reglas de la UE en materia de telecomunicaciones que entrarán en vigor el 25 de mayo. En ellas, se obliga a los proveedores a informar a sus clientes, antes de firmar el contrato, sobre sus técnicas de gestión de tráfico, posibles restricciones de acceso a servicios particulares y velocidad de Internet.
Según la comisaria, Bruselas quiere “garantizar que los ciudadanos y las empresas de la UE puedan disfrutar de los beneficios de un Internet abierto y neutral, sin restricciones ocultas y a la velocidad prometida por los proveedores”.
Por ello, a finales de este año la Comisión publicará una lista con los nombres de los operadores que realizan estas “prácticas dudosas”. Para acabar con ellas, según Kroes, el organismo no dudará en proponer medidas más estrictas, e incluso en prohibir el bloqueo de servicios o aplicaciones legales.
Entre las aplicaciones afectadas por estas prácticas podría encontrarse Skype, un software que sirve para realizar llamadas de forma gratuita a través de Internet.
