Bruselas podría estar estudiando aceptar laudos arbitrales que demuestren que determinadas entidades financieras cometieron malas prácticas en la comercialización de participaciones preferentes, lo que podría minimizar el descuento aplicado a estos productos en las entidades rescatadas, según publica Europa Press, que cita fuentes financieras.
“Bruselas estaría abierta a aceptar arbitrajes en las entidades donde se demuestre que las participaciones preferentes se vendieron mal, pero los costes del programa de ayuda aumentarían”, señalan a la agencia esas fuentes.
No obstante, esta menor carga para los titulares de preferentes podría engrosar la factura final para sanear la banca española por encima de los 41.000 millones de euros, incluyendo 1.500 millones solicitados para reestructurar Liberbank, BMN, Ceiss (Caja España-Duero) y Caja 3.
El Memorándum de Entendimiento (MoU) del rescate bancario firmado entre el Gobierno y la Comisión Europea establece que los titulares de preferentes de los bancos con ayuda de la UE deberán asumir pérdidas para reducir los costes para los contribuyentes. El Banco de España ha estimado que los tenedores de estos productos híbridos de capital recuperarán entre un mínimo del 30% y un máximo del 70%.
Bankia, Novagalicia y CatalunyaCaixa, los tres grupos de cajas nacionalizados por el Estado, tienen en circulación algo más de 4.500 millones de euros en participaciones preferentes, en las que han quedado atrapados miles de clientes que ni pueden retirar sus inversiones ni cobran intereses.
