El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha recriminado al líder del PP, Pablo Casado, su actitud en torno a la gestión de la crisis del Covid-19, que ha estado marcada por oponerse “a cualquier cosa”. “Lo único que ha hecho estas 10 semanas ha sido posar”, ha criticado el jefe del Ejecutivo al popular, ya sea “delante de un espejo muy enfadado aparentemente” o “al lado de unas ovejas”.
Casado “concursa y compite con (Isabel Díaz) Ayuso en posados”, ha afirmado Sánchez en la sesión de control al Gobierno de este miércoles en el Congreso en la que ha instado al líder del PP a que reflexione sobre su actitud política. “Si habla como Vox, actúa como Vox y vota como Vox podemos inferir que, si no es lo mismo, empieza a parecer lo mismo que la ultraderecha”. Algo ante los que, ha advertido el presidente, “es un problema para la democracia española”.
Pedro Sánchez ha respondido así a Pablo Casado en una sesión marcada por las dimisiones y ceses que se han producido estos últimos días en las filas de la Guardia Civil. Un tema que ha marcado la cita de hoy en el hemiciclo de la mano de PP y Ciudadanos. El propio popular ha exigido responsabilidades al Gobierno “por sabotear la independencia judicial en la investigación de presuntos delitos el 8-M”.
“Desde Roldán nadie había manchado así a la Guardia Civil y todavía pretende taparlo con aumento salarial aprobado por el PP”, ha afeado Casado a Sánchez, a quién le ha reclamado la dimisión de Fernando Grande-Marlaska. “El que sobra en esta farsa ya convertida en tragedia no es un coronel, es su ministro”.
La pregunta del líder del PP al presidente en esta sesión de control versaba sobre la derogación de la reforma laboral, aunque, además de los mencionados temas, el popular ha hecho referencia en su intervención al estado de alarma, al pacto con Bildu, así como a la vuelta de la Liga de fútbol y del turismo internacional.
Respecto a la reforma laboral, Sánchez ha insistido en que es un tema que está en el programa electoral y en el acuerdo de PSOE con Unidas Podemos y ha defendido la necesidad de “recuperar derechos laborales arrebatados” y “reconstruir los consensos sociales rotos”, aunque ha eludido decir la palabra derogar en todo momento.
