¿Ahorrar con tarjetas de fidelización es posible?

Contenido patrocinado

¿Ahorrar con tarjetas de fidelización es posible?

Para poder sacarles todo el provecho ahorrativo es importante emplearlas de forma racional y no permitir que el consumo compulsivo surja por causa de tener a mano este tipo de tarjetas.

Tarjetas de crédito

Una de las medidas más utilizadas por las marcas y establecimientos para conseguir mantener a su clientela son las tarjetas de fidelización. Las tarjetas de fidelización son tarjetas con las que se conceden bonificaciones, descuentos premios a su titular cuando consumen productos de la propia marca o del establecimiento que la ha emitido. Con esta forma de actuar las tarjetas de fidelización por un lado ejercen dos efectos aparentemente contrapuestos para el ahorro del cliente. Por un lado, incentivan que se consuma más (negativo para el ahorro) por otro que el precio a pagar por ese consumo salga más barato (positivo para el consumo) para que las tarjetas de fidelización finalmente sirvan de instrumento para el ahorro hay que buscar que el segundo efecto predomine sobre el primero. Desde Viaconto te traemos algunas claves para lograr este objetivo.

Racionalizar el consumo

Según un estudio elaborado por la web Kelisto.es las tarjetas de fidelización sí que consiguen ser un instrumento de ahorro, pero muy poco útil. En suma, lo que permite ahorrar al año es 32,5 € que es apenas un 0,8% del total del consumo familiar. Para poder sacarles todo el provecho ahorrativo es importante emplearlas de forma racional y no permitir que el consumo compulsivo surja por causa de tener a mano este tipo de tarjetas. El mantener los mismos hábitos de consumo más una tarjeta que merme la factura de nuestras compras habituales es una buena forma de sacarles el mejor partido. Por otro lado, que sean tarjetas de fidelización, no nos obliga a ser fieles a la marca si no nos conviene. El tener una tarjeta de fidelización no nos debe motivar a dejar de comparar precios entre productos y ver si incluso con la tarjeta de fidelización otras opciones son mejores para el bolsillo.

Cosas a tener en cuenta

Además de todo lo anteriormente mencionado hay varias cosas a tener en cuenta. Por un lado, en muchas ocasiones este tipo de tarjetas pueden conllevar algunos gastos asociados como comisiones de alta o de renovación. Además, en el caso de disponer de crédito, el interés que añade acostumbra a ser más elevado que el de los préstamos personales como los créditos rápidos de Viaconto. Tener en cuenta esos costes –si los tiene- es muy importante a la hora de decidir si tomar o mantener alguna de esas tarjetas de crédito de fidelización es necesario. Por otra parte, hay que tener en cuenta si las tarjetas de fidelización nos resultan útiles, una tarjeta de ahorro en gasolina para un usuario de transporte público no tiene mucho sentido, o bien, tarjetas de descuentos en viajes si apenas se viaja. En resumen, con las tarjetas de fidelización o tarjetas de crédito de fidelización se puede conseguir ahorrar más que se gasta siguiendo ciertas pautas y estar al tanto de los costes financieros que pueden terne, pues si estas tarjetas actúan como una forma de préstamos velado hay otras opciones más asequibles en créditos rápido y créditos personales. Por ejemplo, como los que ofrecen Viaconto.

Más información