Schäuble culpa al BCE del ascenso de la derecha populista en Alemania

Schäuble culpa al BCE del ascenso de la derecha populista en Alemania

Wolfgang Schäuble, ministro de Finanzas de Alemania

La política de tipos negativos del BCE levanta ampollas en el Gobierno alemán y despierta críticas en el FMI. Las tensiones entre el Gobierno alemán y el Banco Central Europeo (BCE) por las políticas monetarias puestas en marcha se hacen cada vez más patentes después de que el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, haya culpado a la institución que preside Mario Draghi de buena parte de la responsabilidad de la mejora en intención de voto del partido populista Alternative für Deutchland (AfD).

“Le dije a Mario Draghi… muy orgulloso: puedes atribuir el 50% de los resultados de un partido que parece ser nuevo y exitoso en Alemania al diseño de esta política”, señaló el ministro en unas declaraciones de las que se hacen eco los analistas de Bankinter en un informe. “Hay una creciente comprensión de que la excesiva liquidez se ha convertido más en una causa más que en una solución al problema”, remató.

No son las únicas críticas que ha recibido el BCE en las últimas horas. En una línea más moderada, José Viñals, del Fondo Monetario Internacional (FMI), también ha criticado la política de tipos negativos del BCE, al señalar que, aunque los beneficios derivados de una reactivación de la demanda como consecuencia de la aplicación de tipos negativos superan los costes potenciales, hay límites con respecto a cuánto de negativos pueden ser éstos antes de que empiecen a generar acumulación de efectivo físico (por parte de empresas y particulares).

Por su parte, Yves Mersch, consejero del BCE, ha venido a decir este fin de semana que con el empleo tan intensivo de política monetaria extrema puede llegar un momento en que los retornos conseguidos sean decrecientes.

Finalmente, Larry Fint, CEO de BlackRock, ha defendido en su carta anual a los accionistas que “hay límites sobre cuánto de lejos pueden llegar los tipos de interés negativos antes de que empiecen a fomentar la acumulación de efectivo” y que “la realidad tiene implicaciones profundas sobre el crecimiento económico: los consumidores necesitan reducir su nivel de gastos para conseguir ahorrar para su jubilación… de manera que una política monetaria dirigida a estimular el consumo puede terminar reduciéndolo”.

Los analistas de Bankinter señalan en su informe que todas estas declaraciones ejercen presión para que el BCE se retraiga de seguir poniendo los tipos más en negativo, pero “es improbable que sus decisiones cambien por esto”. “Seguimos pensando que continuará profundizando en tipos negativos y que eso ayudará al PIB europeo y que no es negativo sino positivo para los bancos europeos, aunque las primeras evidencias de esto no serán inmediatas”, zanjan los expertos.

Más información